La Teología de la Liberación también contribuye a las ideas de izquierdas al ofrecer una crítica ética y espiritual al capitalismo. En un mundo donde el neoliberalismo ha exacerbado las desigualdades y donde las políticas económicas a menudo favorecen a las élites en detrimento de la mayoría, esta teología proporciona un contrapunto necesario. Su denuncia de la idolatría