La convicción que tenemos, desde el sentido común, es que no hay marcha atrás. El consumismo, el despilfarro, los modos del capitalismo realmente existente, como la acumulación por despojo, nos han llevado a esta situación. Por supuesto que hay culpables mayores (grandes corporaciones, ejércitos, estados-nación), pero eso no es suficiente. Los de abajo también tenemos