Los desacuerdos no dejan ver el consenso
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Los políticos, analistas, periodistas se enfocan en las diferencias entre y dentro de los países, en especial si son potencias.
La OTAN contra Rusia-China, libre comercio y proteccionismo, Occidente y sus guerras sin militares con objetivos en Siria, Irán, Venezuela, Cuba, Yemen, la desigualdad entre ricos y el resto…
Lo que se dice y no/se hace en relación al cambio climático.
La 14ª cumbre del Grupo de los 20 (G20) concluyó aquí el sábado con el compromiso de materializar un ambiente libre, justo, no discriminatorio, transparente, predecible y estable de comercio e inversión, mientras mantienen abiertos los mercados. Xinhua
Trump exige a India que retire su «inaceptable» aumento de aranceles a los productos estadounidenses. El pasado 16 de junio, Nueva Delhi decretó una subida de las tarifas a la importación de 28 productos de EE.UU. en respuesta a la decisión de Washington de retirarle privilegios comerciales. RT
La atención está en las posturas enfrentadas por intereses del presente en que participan políticos y pueblos.
Pero debajo hay un consenso muy poco visible.
Los gobiernos y pueblos coinciden en ir tras el productivismo, consumismo, extractivismo. El crecimiento económico exponencial.
Algunos lo saben la mayoría no, la concordancia humana es seguir el camino empresarial que daña progresivamente el planeta y sus formas de vida.
Así el problema no es luchar desde un bando contra otro sino desde la mínima fuerza contra todos.
Ningún gobierno hace su política para crear el modo de vida sostenible. No se conoce de inmensas manifestaciones ciudadanas exigiendo el paso a otra civilización que sea posible en el tiempo largo.
La marcha al colapso de la naturaleza se hace con banderas equivocadas de conquistas nacionales o sociales de corto plazo.
Las grandes luchas que se informan y discuten son por logros sin futuro.
Por inducción el consenso está donde no debiera.
El Orden planetario de los empresarios es insostenible. No les sirve ni siquiera la conquista.
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