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Bolsonaro enfrenta denuncia por intento de golpe y podría recibir hasta 39 años de cárcel

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El expresidente de Brasil, Jair Bolsonaro, fue formalmente denunciado este miércoles por la Procuraduría General de la República (PGR) bajo cargos de organización criminal armada, intento de abolición violenta del Estado Democrático de Derecho y golpe de Estado. De ser condenado por todos los delitos imputados, Bolsonaro podría enfrentar hasta 39 años y cuatro meses de prisión, según estimaciones de juristas consultados por CNN Brasil.

La acusación también involucra a otras 33 personas, quienes habrían participado en acciones para desestabilizar el sistema democrático del país. Entre los cargos adicionales se incluyen daño calificado por violencia y grave amenaza contra el patrimonio de la Unión, lo que según la Fiscalía, representó un perjuicio significativo y un deterioro del patrimonio público.

De acuerdo con el análisis de expertos en derecho penal, la cifra de 39 años responde a una sumatoria de penas máximas por los cinco delitos atribuidos. No obstante, indican que es improbable que Bolsonaro reciba la condena más severa en cada uno de los cargos. Basándose en la jurisprudencia y el Código de Procedimiento Penal brasileño, las proyecciones sugieren que, en caso de ser hallado culpable, la sentencia podría situarse entre 20 y 26 años de prisión.

La denuncia de la PGR se apoya en las leyes 12.850/2013 y 9.605/1998, además de las investigaciones llevadas a cabo por la Policía Federal. Según la Fiscalía, Bolsonaro fue el principal líder de la organización que intentó derrocar el orden democrático del país.




Por su parte, la defensa del exmandatario calificó la acusación de «torpe» y «basada en una sola imputación divulgada anoche». En un comunicado, el equipo de abogados de Bolsonaro argumentó que la denuncia carece de fundamento sólido y se apoya en la delación premiada de Mauro Cid, exayudante de órdenes del expresidente, quien ha modificado su testimonio en reiteradas ocasiones.

«La denuncia inepta llega al punto de atribuirle participación en planes contradictorios entre sí y basada en una única delación varias veces alterada, por un delator que cuestiona su propia voluntariedad», alegaron los abogados. Insistieron, además, en que Bolsonaro «nunca pactó con ningún movimiento que apunte a la desconstrucción del Estado Democrático de Derecho o de sus instituciones».

Si la acusación es aceptada por el Supremo Tribunal Federal, Bolsonaro se convertirá formalmente en acusado y deberá enfrentar un proceso penal en la máxima corte del país.

 



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