Acuerdo en reforma de pensiones : Críticas y preocupación por consolidación del sistema de AFP
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A pesar de que el Gobierno y el Senado califican el reciente acuerdo sobre la reforma previsional como un avance significativo para mejorar las pensiones en Chile, las críticas de expertos y organizaciones sociales indican que la medida podría consolidar el sistema privado de AFP, lejos de las expectativas de cambio estructural prometidas por el presidente Gabriel Boric durante su campaña.
La Comisión de Trabajo y Previsión Social aprobó por unanimidad la idea de legislar el proyecto que propone un sistema mixto de pensiones, incorpora un seguro social en el pilar contributivo y mejora la Pensión Garantizada Universal (PGU). Este avance fue el resultado de intensas negociaciones que permitieron destrabar la tramitación legislativa mediante un conjunto de indicaciones presentadas por el Ejecutivo.
Un acuerdo con énfasis en el sistema privado
El senador de la UDI Juan Antonio Coloma destacó que el acuerdo apunta a mejorar las pensiones del futuro mediante un aumento del 6% en la cotización individual y la reducción de inequidades, especialmente entre hombres y mujeres. Además, se introducen cambios regulatorios para incentivar la competencia entre administradoras y mejorar la PGU hasta alcanzar los 250.000 pesos.
Por su parte, la ministra del Trabajo, Jeannette Jara, subrayó que por primera vez se incluirá a los empleadores en las cotizaciones previsionales, mientras que el ministro de Hacienda, Mario Marcel, celebró el acuerdo como un paso para aumentar las jubilaciones y consolidar un sistema mixto en el que participan trabajadores, empleadores y el Estado.
Sin embargo, para Luis Mesina, vocero de la Coordinadora No+AFP, las modificaciones propuestas por el Gobierno no solo mantienen intacto el sistema de capitalización individual, sino que lo refuerzan. “Las AFP son las más contentas con las indicaciones del gobierno. Les entrega el 6% de aporte adicional”, afirmó. Mesina calificó la reforma como una traición, señalando que “el legado de Boric será consolidar el negocio privado en los derechos sociales”.
Críticas desde la sociedad civil y expertos
Manuel Riesco, economista y vicepresidente de CENDA, manifestó en el Congreso que la reforma perpetúa las “pensiones de miseria” y que el sistema de capitalización individual continúa beneficiando a las grandes administradoras que invierten en el extranjero, mientras el Estado sigue financiando las pensiones en Chile. “Es injustificado mantener este sistema”, concluyó.
Estas críticas reflejan la decepción de diversos sectores que esperaban una transformación radical del sistema previsional. Para ellos, el acuerdo no aborda las demandas históricas de una alternativa pública robusta ni pone fin a las inequidades inherentes al modelo actual.
Beneficios limitados y desafíos pendientes
Entre los cambios aprobados, se incluye la creación de un seguro para lagunas previsionales, la transición de multifondos a fondos generacionales y la incorporación de mejoras para mujeres, como la reducción de desigualdades relacionadas con la expectativa de vida. No obstante, el senador Juan Ignacio Latorre reconoció que “quedarán pendientes materias relacionadas con la división de la industria y la alternativa pública”.
La aprobación del proyecto ha generado un amplio debate sobre el alcance real de la reforma. Mientras el Ejecutivo celebra el consenso alcanzado, organizaciones como No+AFP consideran que este acuerdo consolida un sistema que perpetúa las desigualdades y la dependencia de los trabajadores al capital privado.
En este contexto, la reforma parece haber dejado una pregunta abierta: ¿es este el cambio estructural que Chile necesita para garantizar pensiones dignas, o solo un maquillaje a un sistema que ha sido ampliamente cuestionado? ¿Es esta la promesa de campaña de Gabriel Boric?