Donald Trump confirma que decretará emergencia nacional para deportaciones masivas tras asumir la presidencia
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El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, confirmó su intención de declarar una emergencia nacional con el objetivo de cumplir su controvertida promesa de campaña: llevar a cabo deportaciones masivas de inmigrantes que residen en el país sin autorización legal. A través de sus redes sociales, Trump respondió con un rotundo «¡¡¡CIERTO!!!» a una publicación que especulaba sobre esta medida, según destacaron este lunes medios como ABC News.
Trump, quien asumirá su segundo mandato como Presidente el 20 de enero de 2025, reiteró durante su campaña electoral su compromiso de iniciar este programa de deportaciones desde el primer día de su administración. En un mitin en octubre en el Madison Square Garden, advirtió:
“El primer día, lanzaré el programa de deportación más grande en la historia estadounidense para sacar a los criminales.”
El presidente electo también aseguró que movilizará todos los recursos necesarios para ejecutar este plan, declarando:
“Rescataré cada ciudad y pueblo que haya sido invadido y conquistado, y pondremos a estos criminales viciosos y sedientos de sangre en la cárcel, luego los echaremos de nuestro país lo más rápido posible.”
Equipo de línea dura en inmigración
Para llevar adelante esta ambiciosa política, Trump ha comenzado a conformar un gabinete de funcionarios conocidos por su postura estricta en materia migratoria. Kristi Noem, gobernadora de Dakota del Sur, ha sido designada como secretaria de Seguridad Nacional, aunque su nombramiento deberá ser aprobado por el Senado.
Asimismo, Tom Homan, exdirector interino del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) durante la primera administración de Trump, será el nuevo “zar de la frontera”. Homan ya ha expresado su respaldo total al plan, incluso sin descartar la deportación de familias completas para alcanzar los objetivos trazados.
Un impacto económico y social significativo
La promesa de deportar a los aproximadamente 11 millones de inmigrantes indocumentados que residen en Estados Unidos ha generado alarma entre diversos sectores. Expertos advierten que esta medida, además de costar miles de millones de dólares, podría tener un impacto devastador en la economía del país, que depende en gran medida de la mano de obra inmigrante en sectores clave como la agricultura, la construcción y los servicios.
Durante la campaña, Trump también sugirió medidas extremas como desplegar a la Guardia Nacional para reforzar las deportaciones e incluso considerar el uso de tropas extranjeras en la frontera con México, propuestas que han sido duramente criticadas por grupos defensores de los derechos humanos y líderes comunitarios.
A medida que se acerca su toma de posesión, la perspectiva de esta política masiva de deportaciones ha polarizado aún más el panorama político en Estados Unidos, planteando interrogantes sobre su viabilidad, sus costos y sus consecuencias humanitarias.
Ricardo says:
La medida más efectiva sería que Trump suspendiera de inmediato las sanciones a Venezuela : el tsunami humano de 8 o 9 millones de desplazados que ellas han generado ( cf. Jeffrey Sachs , M. Weisbrot et al.: «Sanciones económicas como castigo colectivo: el caso de Venezuela» ) ha provocado un enorme efecto dominó en otros países de América, afectados estructuralmente por desempleo o subempleo, efecto que explica la mayor presión demográfica en las fronteras de EEUU , país que además hoy tiene ¡¡ Pleno Empleo!!