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Crónica desconocida de Nueva Suabia, nueva novela de Héctor Bravo Zúñiga sobre los misterios de la Antártica

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El escritor Héctor Bravo Zúñiga acaba de publicar su segundo libro, Crónica desconocida de Nueva Suabia, una novela del género ciencia ficción cuyo desarrollo se sitúa en el continente antártico y posee indudables raíces históricas. Para saber más sobre esta entrega conversamos con el autor.

 

¿Cómo nace la idea de escribir esta novela?

La necesidad de comunicar ciertas ideas esenciales y de someter la sociedad actual a un método de contraste que desnude sus falencias, muchas de las cuales calificamos de virtudes siendo en verdad perversiones, me llevó a concretar esta novela que, como corolario, explora los géneros de ciencia ficción y misterio, los más atractivos en materia narrativa según mi opinión relativa.

 

Nueva Suabia nace de una realidad histórica, de una expedición alemana ¿Cómo llegas a ella?




La segunda guerra mundial fue un conflicto fascinante que marcó un antes y después en el desarrollo de las tecnologías a disposición de la raza humana. Ese salto técnico, jamás presente en los cientos de anteriores conflictos armados, sigue envuelto en una bruma de incertidumbre y misterio poco aclarado hasta nuestros días. Ante la coyuntura, por mera curiosidad e inquietud intelectual, indagué años buscando información sobre el particular hasta encontrar indicios suficientes que me permitieron presentar un esquema coherente en la novela que propongo.

 

Los personajes de la novela, ¿tienen sus semejantes reales, o son totalmente ficticios?

De todos los personajes presentes en mi escrito, sólo el Coronel Kammler existió. Es interesante añadir que, estrictamente hablando, su muerte sigue siendo incierta y no hay evidencia objetiva que confirme su deceso. Lo único concreto es que el hombre desapareció poco antes de finalizado el conflicto bélico.

Sin embargo, quisiera añadir que varios hechos presentes en el libro son reales y sucedieron como se describen, existiendo respaldo documentado de los mismos. Destacan, entre otros: El Incidente VELA, la Operación Highjump, La Operación Paperclip y, el más importante, la fundación por parte del Reich de la base secreta Nueva Suabia.

 

El mito de una base alemana secreta en la Antártica, ¿cómo se origina? ¿tienes antecedentes de ello?

El Reich alemán llevó a cabo un programa amplio de excursiones alrededor del mundo en busca de recursos naturales, tecnologías y posiciones estratégicas una vez que Hitler asumió el poder. La Antártica, lógico, llamó la atención de los nazis por lo extenso del territorio y las ilimitades posibilidades que entregaba el continente como zona de explotación de minerales y otros suministros, además de ofrecer la oportunidad de mantenerlos alejados, en un lugar inhóspito e inexplorado, ideal para llevar a cabo investigaciones en el más absoluto anonimato. Los antecedentes al respecto se encuentran en los registros sobrevivientes de la expedición que se realizó a la Antárctica entre los años 1938 y 1939. No obstantes, los alemanes comenzaron a escudriñar esa zona del orbe desde fines del siglo XIX.

 

El final de la novela deja espacio para, como dicen en las series de TV, “continuará”. ¿Has pensado en escribir una segunda parte de esta Crónica desconocida de Nueva Suabia?

Siendo honesto, el libro fue concebido como se presenta y creo que cumple con los objetivos que tracé al momento de abordar la historia. Sin embargo, ha sido considerable el número de personas que me pregunta por una eventual segunda parte y otros, sin más, me piden escribirla. Meditando sobre el particular, esbocé y esquematice una continuación de la historia que parece coherente con el libro recién publicado, por lo que es muy probable que termine lanzando una segunda parte. Empero, hoy me encuentro ad-portas de comenzar a escribir una novela sobre otro tema, que en su momento divulgaré, lejos del tópico que expone Nueva Suabia, cuestión que retrasaría la entrega de una eventual continuación.

 

La Antártica es un territorio que al parecer oculta muchos secretos y riquezas, y varias naciones reclaman parte de soberanía, ¿cómo ves su futuro? 

Dudo mucho que las actuales condiciones presentes en el continente antártico muten en el mediano y largo plazo. El control que las potencias ejercen sobre el mismo, sobre todo Estados Unidos, es férreo y eficiente, coyuntura que ha mantenido el statu quo inalterado por más de setenta años. Estimo que de no haber un cambio evidente de las fuerzas a nivel mundial y un decaimiento del monopolio americano en los asuntos de occidente, la probabilidad de que suceda algo distinto a lo ya impuesto en la Antártica es mínima.

Es interesante citar que, a pesar de la cantidad de países que reclamaron soberanía sobre territorio antártico, esta se limita a zonas costeras. Sumado a ello, la prohibición impuesta por los norteamericanos de sobrepasar por aire o tierra el paralelo 70° sur, así como la imposibilidad de posicionar cualquier satélite civil en una órbita polar, que incluso obligó a Google parchar el polo sur geográfico en su aplicación “Maps”, son indicios que levantan sospechas sobre las actividades que se llevan a cabo en lo profundo del continente antártico desde la década de 1950.

 

 

 

 

 



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