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¿Qué refleja el dato de inflación de marzo?

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En marzo el nuevo IPC se incrementó en 0,4% respecto al mes previo, mientras en enero y febrero había aumentado en 0,7% y 0,6% respectivamente.

Aún es temprano en el año para identificar tendencias, pero el principal impacto a la baja viene de las frutas y verduras, con un -2,2% en febrero-marzo respecto a enero, y de los alimentos en general, con un -0,6%. En cambio, aumentó en ese lapso el IPC de la vivienda en un 1% y el de la energía en un 1,8% promedio. Esto último se explica en parte porque el peso se devaluó frente al dólar en un 3,8% en enero, un 6,1% en febrero y un 0,5% en marzo, impactando al alza los precios de los bienes importados, como los combustibles.

Sin alimentos y energía, el IPC promedio desde enero aumentó en 0,6% mensual, más que el IPC general, y los no sujetos a comercio internacional en 0,8%. Esto se explica porque los servicios han registrado una tendencia alcista y aumentado también sus precios en un 0,8% promedio mensual, influenciados por la vivienda y la educación, lo que es usual en esta parte del año.

Para alcanzar la meta de 3% anual de inflación, meta razonable para la economía chilena en un horizonte de 24 meses, se requiere llegar a un aumento del IPC de no más de 0,25% promedio mensual. El dato de marzo está ya algo más cerca de esa cifra, pero aún lejos.

Desde enero de 2024 el INE utiliza una canasta actualizada del consumo promedio de los hogares, que reemplaza la de 2018, para evaluar los cambios mensuales de los precios de los bienes y servicios al consumidor. La información proviene de la IX Encuesta de Presupuestos Familiares realizada por el INE entre octubre de 2021 y septiembre de 2022. Para iniciar el cálculo del IPC en enero de 2024 con la nueva canasta, el INE fijó las ponderaciones obtenidas de la encuesta a los precios promedio de 2023. Las tres principales «divisiones» (grupos de productos) son ahora «alimentación» (22% del gasto promedio de los hogares), «vivienda y servicios básicos» (17%), «transporte» (13%), seguidas de «información y comunicación», «restaurantes y alojamiento» y «equipamiento y mantención del hogar» (con alrededor de 6% cada una).

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