Deuda histórica: vergüenza nacional
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Un grupo de profesoras y profesores jubilados se reunieron ayer martes 17 de agosto en la Plaza Aníbal Pinto de Valparaíso con el objeto de participar en la filmación de un Documental destinado a registrar testimonios relacionados con la “Deuda Histórica”, que aún después de 40 años sigue sin ser resuelta por parte de Estado de Chile, lo que constituye una vergonzosa situación que afecta a miles de profesoras y profesores.
A lo largo de los años han fallecido un alto porcentaje de docentes sin haber recibido el pago que en derecho les correspondía, ni tampoco algún tipo de reparación que sirviera para mejorar las miserables pensiones que reciben después de haber trabajado durante 30, 35 o más años educando y formando a distintas generaciones de niñas y niños chilenos. La principal causa de la “Deuda Histórica” obedece al proceso de “Municipalización” de la Educación Pública implementado a partir del año 1981 por la dictadura cívico militar.
En la página del Colegio de Profesores y Profesoras de Chile se expresa que:
“La Deuda Histórica de los profesores se originó por el incumplimiento de la Ley Nº 3.551 de 1981, que dispuso un reajuste del sueldo base al sector público, estableciendo en su artículo 40 una ‘asignación especial’ no imponible para el personal docente dependiente del Ministerio de Educación.
Como resultado de la municipalización impuesta a partir del año 1981, la mayoría de los profesores no alcanzaron a recibir el 100% de la asignación, pues al ser traspasados al sector municipal, los nuevos empleadores desconocieron los derechos adquiridos por los profesores.
(…)Es una de las causas más sentidas por el profesorado chileno, no sólo por la injusticia cometida con miles de maestros en la década de los 80, sino también, porque pasan los años y ningún gobierno democrático ha resuelto esta problemática…”
Mientras esperaban la llegada del equipo de filmación del largometraje denominado “La Deuda”, las profesoras y profesores, provenientes de distintas regiones del país, provistos de lienzos y pancartas, realizaron una acción de protesta delante de la pileta de Neptuno, gritando consignas para denunciar esta dramática situación que les aqueja y que se arrastra por tantos años.
Llamó mi atención una profesora que portaba una pancarta de la ciudad de Talca, que me hizo de inmediato recordar a mi hermana Patricia, que estudió precisamente en la Escuela Normal de Talca, recibiéndose como profesora normalista y trabajando durante años en los sectores rurales y en distintos colegios de dicha ciudad, quien falleció sin haber recibido jamás el pago de esta vergonzosa deuda histórica recibiendo, además, una precaria jubilación.
Transcribo a continuación algunos relatos registrados durante esta movilización:
“Somos profesoras jubiladas que a lo largo de todo Chile seguimos exigiendo el pago de la deuda histórica. Hace 40 años que no nos pagan. Yo soy de Talca, de la región del Maule y mi nombre es Nelda Sotomayor, soy profesora normalista y vengo en representación de todas mis colegas.”
“Yo soy profesora de historia, vengo de la ciudad de Santiago y el problema de la deuda histórica se arrastra sin ser solucionado por muchísimos años. Actualmente esta deuda es tan grande que se hace prácticamente imposible que sea pagada en su totalidad, pero nosotras estamos pidiendo que al menos se nos entregue una reparación que pueda servir para mejorar un poco las pésimas pensiones que recibimos. Cuando hay elecciones los candidatos se acercan a pedir nuestros votos y nos ofrecen y prometen soluciones, pero ningún gobierno ha cumplido estas promesas. Esto es una vergüenza”
“Vengo de Concepción, de la región del Biobío y esta lucha la llevamos adelante desde hace muchos años y seguiremos protestando para exigir nuestros derechos mientras tengamos fuerzas. De un total de 80.000 profesoras y profesores a los que nunca se les ha pagado esta deuda ya han muerto cerca de 20.000. Nuestras jubilaciones ni siquiera nos alcanzan para cubrir nuestros gastos más esenciales. Ahora estamos acá porque se está haciendo una película para que quede como un testimonio de denuncia esta situación de la deuda histórica que sufrimos los profesores jubilados”
Guillermo Correa Camiroaga, Valparaíso 17 agosto 2021
