Corrientes Culturales

Sexto Festilambe de Valparaíso

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Ayer sábado 12 de diciembre veinticinco pequeñas cajitas montadas sobre trípodes, como esas máquinas fotográficas de cajón antiguas, conformaban un armónico círculo ocupando el espacio urbano del sector de la Plaza Sotomayor, justo en frente del edificio del Ministerio de las Culturas y las Artes en Valparaíso, en una jornada más del Sexto Festival de Teatro Lambe Lambe (FESTILAMBE), que este año se denomina “Para Mirarnos a los Ojos”, producido y organizado por la Fundación OANI de Teatro, que es una compañía de teatro radicada en la ciudad puerto desde el año 2007 y que fue creada “con el objetivo de producir espectáculos teatrales con actores y formas animadas, combinando equipos artísticos según la índole del proyecto, renovando y experimentando lenguajes escénicos que contagien humanidad(…) dirige su trabajo en dos grandes líneas de acción: la creación, desarrollo, fortalecimiento y liderazgo en Chile del Teatro Lambe-Lambe y la investigación/creación de Teatro y Teatro de Animación de Formas en distintos formatos”, como ellos mismos explican en el folleto entregado durante esta sexta versión del festival.

 

 

En esta misma publicación, explican de qué se trata este espectáculo, expresando:

“El Lambe-Lambe son espectáculos de Teatro de Animación con pequeños muñecos y objetos que, acompañados por una música y/o voz, dentro de una cajita escénica, representan en pocos minutos, secretas situaciones teatrales para un espectador por función. El público se coloca audífonos y observa la obra a través de una ventanilla. El actor/animador al lado opuesto de la caja, pone en escena la obra manipulando la iluminación, el sonido, los muñecos y/o objetos. El Teatro Lambe Lambe se inició en Brasil en 1989 gracias a Denise Santos e Ismine Lima quienes, inspiradas en los antiguos fotógrafos de plaza de Brasil llamados fotógrafos Lambe Lambe, crearon su primera obra llamada “La Danza del Parto” (…) OANI Teatro heredó el lenguaje teatral Lambe-Lambe cuando residió en Brasil entre los años 2002 y 2006…”

Esta sexta versión del FESTILAMBE presenta 25 espectáculos nacionales, con las más variadas temáticas, que se desarrollan al interior de estos teatros en miniatura, estableciéndose una relación de íntima complicidad entre el espectador(a) y el creador(a)-productor(a)-actor(a).




 

 

 

 

Estos espectáculos, aún cuando pareciera que están indicados para niños y niñas, son adecuados a los espectadores(as) de todas las edades, y durante el tiempo que estuve observando el desarrollo de este Festival, la mayoría del público asistente eran personas adultas, las que, obviamente, se transportan lúdicamente a edades anteriores.

 

 

Transcribo a continuación la conversación que entablé con una de las espectadoras, de nombre Wakolda, una mujer sureña  de mediana edad, luego que presenciara tres de los espectáculos a disposición:

¿Me podrías  relatar la experiencia que tuviste con el Teatro Lambe?

“En el primer espectáculo la muchacha que presentaba la obra me dio las indicaciones técnicas de cómo tenía que hacerlo, diciéndome que tenía que mirar muy bien, porque los actores eran pequeñitos, para no perder nada de la obra. Hacer la experiencia me transportó a mi infancia, una vez que proyectaban unas imágenes en una pantalla y alguien iba hablando detrás, no es lo mismo, pero me recordó un poco eso.”

¿Cuántas obras viste?

“Alcance a ver tres obras, porque ya era la hora en que estaba terminando la jornada.”

¿De qué se trataba la primera obra que viste?

“Era una historia ambientada en un pueblo andino, era la historia de un hombre y una mujer, o una joven y una muchacha, que se encuentra, es una historia de amor. Como telón de fondo había un animalito altiplánico, una llama o un guanaco, y lanas de colores, un paisaje nortino.”

¿Y la segunda?

“Era la historia de un perrito de la calle, que sale a ladrar, y hay un señor que pasa y reta al perro porque está ladrando. La historia sigue transcurriendo y después este mismo señor vuelve a salir, se tropieza, se cae y resulta que no se puede parar. Pasa varias personas y nadie lo ayuda. Pasa un joven mirando concentrado una tablet y ni siquiera ve a la persona que está en el suelo. Nadie hace nada, nadie lo ayuda a pararse. De repente aparece el pero que él había maltratado, empieza a ladrar, se acerca y el perro lo levanta. El señor se va y cuando vuelve nuevamente entabla una relación armoniosa con el perro”.

Y respecto de la última obra que me puedes contar…

“El último espectáculo, que era el primero que quería ver, pero estaba ocupado, se llamaba “Sol Naciente”. Me llamó la atención, porque me gusta el sol y supuse que tenía que ver con Japón. Esta fue la que más me gustó de las tres, por la decoración que tenía en el interior. Había una muñeca japonesa vestida con su ropa súper bonita, y la decoración de la escena era espectacular. Es la historia de una muchacha jovencita que tiene que ir a buscar leña a la montaña todos los días, y le carga hacer eso. Las montañas están dibujadas como en acuarela, el paisaje es hermoso. Como a la muchachita le carga hacer ese trabajo ella canta como para distraerse. Pero un día como que descubre algo y cuando ella mira se levanta una cortina y aparece un puente colgante hecho con maderitas en donde hay un maestro y un aprendiz de artes marciales. Esta obra fue la que más me gustó porque encontré que la decoración era espectacular, la pintura, el paisaje, las paredes, los cerros, una pintura hecha con acuarela muy bonita. El puente colgante esta hecho muy meticulosamente y los personajes o las marionetas están muy bien hechas con su movimientos y eso me encantó.”

Dada la situación en que estamos, qué medidas de protección tuviste que hacer

“Me tomaron la temperatura, me pasaron alcohol gel y un protector facial para usar encima de la mascarilla. Antes de sentarte limpiaban todas las superficies del asiento y del cajoncito con alcohol, el visor también y cuando uno terminaba entregaba el protector facial y lo colocaban en unos tambores para que no fueran utilizados nuevamente.”

 

 

 

¿Habías visto este tipo de espectáculo antes?

“No, no lo conocía, primera vez que lo veo.”

¿Cómo podrías describir este Teatro Lambe Lambe?

“Lo definiría como un cuento que una le lee a los niños. Es un trabajo muy minucioso para poder hacer todas esas figuras pequeñitas, las pinturas, la decoración del escenario, es un trabajo brillante de puesta en escena. Había muchos escenarios, pero solamente pude ver tres, y todos eran distintos, con distintas formas, decorados de distinta manera, con distintos temas. Además, la persona que opera este teatro, la persona que va haciendo las voces de los distintos personajes, haciendo el relato, eso también es muy interesante.”

¿Te pareció como estar dentro de un teatro “normal”?

“Por supuesto, claro que sí, porque primero había que esperar que sonara una campanita que indicaba el inicio del espectáculo, entonces se abría el telón, aparecían los personajes y se despliega adentro un mundo en miniatura, con cambios de escenarios, con profundidad. Sí era como estar en un teatro.”

 

Los tres espectáculos a que se refiere Wakolda son: “Amor Andino”, con la animadora Sol Gallardo; el segundo se llamaba “Ciudad Quiltra”, con Juan Pablo Caiozzi como animador; y el último se titula “Sol Naciente”, con el animador David Escalante. En las tres obras se utiliza la técnica de varillas y duran alrededor de tres minutos cada uno.

 

Guillermo Correa Camiroaga, Valparaíso 12 diciembre 2020



Corresponsal Valparaíso

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