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Milei abatido y los TLC desacreditados con los aranceles de Trump
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El presidente estadounidense no renuncia a su agresividad comercial. Impuso un arancel del 25% a las importaciones de acero y aluminio y fue claro en señalar: sin excepciones ni exenciones.
Esto implica un golpe doloroso para el presidente argentino, Javier Milei, porque según el liberal libertario “los impuestos son un robo”; y, debe saber que los aranceles son un impuesto que se aplica en frontera a los bienes de importación. El liberal libertario debe estar molesto, y muy sentido, por la deslealtad de sus dos socios carnales, Trump y el empresario Elon Musk.
Pero, más allá de la deslealtad, hay una preocupante realidad objetiva que complicará al país trasandino, al igual que a los demás destinatarios de esta medida económica, porque los aranceles afectarán la competitividad de las exportaciones.
En esa línea, durante el año 2024, Argentina exportó a EE.UU. aluminio por valor de USD 515 millones, mientras las colocaciones de hierro y acero sumaron USD 112 millones. Y, no hay que olvidar, que los grandes empresarios argentinos, responsables de estas exportaciones, son sostenedores de Milei.
El asunto es más grave para Canadá, Brasil y México, ya que son los principales países afectados por la medida arancelaria, cuyas ventas conjuntas cubren la mitad del acero que importa el mercado estadounidense. Canadá es, además, el mayor proveedor de aluminio: de las 28.858.000 toneladas netas de acero que EE.UU. importó en 2024, el volumen principal provino de Canadá (6,56 millones de toneladas), le siguió Brasil (4,5 millones de toneladas), y en tercer lugar México (3,5 millones de toneladas).
Trump, entonces, no sólo ha mostrado deslealtad con su amigo Milei sino que, además, no cumple con los compromisos establecidos en los Tratados de Libre Comercio que ha suscrito EE.UU. Está violando un tratado que él mismo renegoció en su primera administración, el TLC con México y Canadá (T-MEC), porque no le gustaba el que había negociado y suscrito el presidente Clinton en 1993.
Y nuestro país no está exento de efectos negativos, la elevación de los aranceles también es un incumplimiento del TLC Chile-EE.UU., suscrito entre los presidentes Lagos y Bush en 2003. La Asociación de Industrias Metalúrgicas y Metalmecánicas (ASIMET), ha manifestado sus preocupaciones porque se verá en peligro la competitividad de las exportaciones del sector metalúrgico metalmecánico chileno en el mercado norteamericano, con ventas que en 2024 alcanzaron los US$ 286,6 millones.
En sus primeros días de gobierno Trump había anunciado la imposición de aranceles generales del 25% a Canadá, y México, que luego dilató por un mes su aplicación. Y, ahora, no vaciló en la introducción de aranceles del 25% para el acero y el aluminio que importa a EE.UU., decisión que entrará en vigor desde el 12 de marzo y con la cual cree el mandatario que recuperará la industria local.
Pero Trump comete dos errores. No se da cuenta que los costos de producción de la siderurgia y el aluminio se elevarán y que, al mismo tiempo, los productos elaborados que requieren de esas materias primas afectarán la inflación. Y, por otra parte, es ineludible que sus vecinos, México y Canadá, pero también Brasil y otros exportadores de acero y aluminio replicarán con alzas arancelarias.
Donald Trump no respeta a sus vecinos ni tampoco a sus amigos y, lo más grave, es que no reconoce la validez de los tratados comerciales, firmados por otros presidentes de EE.UU. e incluso por él mismo en el pasado. Ha instalado la ley de la selva.
Roberto Pizarro Hofer
Patricio Serendero says:
EEUU no respeta ningún acuerdo. Ninguna institución internacional si se siente perjudicado. Mienten sistemáticamente. La lista de sus intervenciones militares basadas en mentiras es interminable.
Ahora claro, este nuevo Nerón respeta todavía menos.
Renato Alvarado Vidal says:
¡Y tan orgullosos que estaban los de la Concertación cuando firmaron el TLC con gringolandia!
¡Tan felices que se veían al bajarse las bombachitas!
¿Se acuerda señora Alvear?