Acerca del libro Huellas de un enemigo interno
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El libro “Huellas de un Enemigo Interno” del periodista y académico Héctor Vera Vera, presentado recientemente en uno de los sitios de Memoria del Estado Nacional, sin duda dejará huellas, surcos y reflexiones. En esta obra, el autor detalla su detención y secuestro en la base aérea de Cerro Moreno de Antofagasta, en donde fue sometido a un Consejo de Guerra que lo declaró un “prisionero de guerra” y “enemigo interno”, a días del golpe de Estado.
Acompañar a Héctor Vera en la travesía de escribir este libro, oportuno y necesario, ha sido para mí un verdadero privilegio. Agradezco a Héctor la confianza depositada y espero haber estado a la altura, considerando que lo suyo ha tenido como propósito cumplir con una misión y compromiso histórico con nuestro país.
No me referiré al contenido de este libro. Me referiré a lo que creo y pienso sinceramente acerca del significado y aporte que conlleva esta obra para todos y todas, principalmente para quienes nos sentimos identificados con cada una de las revelaciones que el autor plasma en su libro.
Huellas de un enemigo interno, es sin duda un acto de justicia para quienes no tuvieron oportunidad de contar el horror de lo vivido. El sólo hecho de mencionarlos en el libro y traerlos a la memoria, Héctor Vera hace justicia, porque Nesko Teodorovic, Luis Alaniz, Washington Muñoz, Elizabeth Cabrera, no están olvidados. Por ellos y ellas, por todos los que no están, seguiremos clamando justicia, verdad y reparación, por siempre.
Huellas de un enemigo interno es un libro de reparación personal, muy íntima de Héctor y su familia. Aunque muy especialmente, y de algún modo también, es un acto de reparación por el daño causado a todas y todos. Un acto de reparación al país, a su gente, en la entrega desinteresada y genuina de lo vivido.
Este libro es además un acto de rebelión. Y es necesario entonces, acudir al poema escrito en prisión por nuestra Arinda Ojeda. Ella dijo con certeza que nuestra rebeldía es vivir. Narrando lo vivido, contando las verdades, Hector Vera rebelde y consecuente hace frente al negacionismo que han querido instalar sobre nuestra historia, sobre lo acontecido en nuestro país con la interrupción brutal, violenta de la democracia y del proyecto social y político del pueblo de Chile, liderado por el Presidente Salvador Allende.
Este libro es también un acto de esperanza. En las primeras líneas su autor narra en detalle con cuánta utopía, confianza y hasta ingenuidad vivimos nuestra historia, aquella que hacen los pueblos. Y sabemos que, haciendo justicia, logrando reparación y manteniendo la rebeldía, construiremos la esperanza, en un futuro digno de ser vivido y para que nunca más en Chile.
Por último y lo principal, este libro es, en mi opinión, un acto de reconocimiento, reconocimiento a las mujeres todas, que no dieron tregua frente a la dictadura, las que cada día, desde el primer momento, se enfrentaron con decisión y coraje a los golpistas, al horror. Nada las detuvo, ni pudieron amedrentarlas.
La valentía de todas aquellas madres, esposas, hermanas, hijas, se encarnan sin duda en el rol que jugó la periodista Cecilia Rivas Otárola, en momento cruciales y desgarradores cuando su compañero Héctor Vera fue declarado “enemigo interno” por la dictadura.
Margarita Pastene Valladares
Huellas de un “Enemigo Interno”. Acontecimientos y reflexiones sobre 51 años de historia de Chile 1973-2024.
Héctor Vera Vera
Piso Diez Ediciones
MAGO Editores
www.magoeditores.cl
