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Reforma previsional: El acuerdo que quemó las últimas esperanzas políticas

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Chile fue el primer país del mundo en aplicar el sistema de capitalización individual y es en la actualidad el único que aún la mantiene en exclusividad. Con el pacto en el Senado entre Chile Vamos y el gobierno para la reforma del sistema de pensiones el futuro del modelo está asegurado. Una nueva cocina en el Senado, mesas técnicas, lenguaje críptico, declaraciones ambiguas. La letra chica para un nuevo engaño y una actitud gubernamental de difícil explicación pública. Cómo pasar del discurso antineoliberal a su defensa plena en tres años. Tarea para analistas e historiadores. ¿Quién es Gabriel Boric y su gobierno? ¿A quién representa? Sin duda no al pueblo que demandaba mejores pensiones y el fin del sistema de AFP.

Cada movimiento o declaración de las elites consolida nuestra historia reciente. Es el peso de las costumbres y los privilegios, que inmoviliza y sólo permite la vuelta atrás. Porque  todo lo que implique futuro está marcado por el miedo. En ello, la ceguera, la obstinación, la circularidad y la mentira.

Así pueden nombrarse algunas de las reacciones de la elite ante la catástrofe política que pulveriza las instituciones y deja atónitos a los ciudadanos. Ante la destrucción provocada por sus propios abusos y errores, las actitudes de esta clase son un cierre de filas, un acuartelamiento entre pares, un resguardo de sus privilegios y un refuerzo de la brecha que los separa de sus electores, trabajadores y el pueblo en los territorios. Ante la fractura, las soluciones son desquiciadas por lo interesadas y apuntan al quiebre, al abismo, a la separación completa de realidades. Si la reparación ya era difícil desde el inicio de las protestas hacia finales de la década pasada, con el correr de los años y de estos turbios días vemos que es imposible. Las elites, cada día más acorraladas en su impudicia, tienden, tal vez atemorizadas por vez primera en la posdictadura, a un mayor encierro. Su salida y respuesta es reforzar y cristalizar sus privilegios. 

La clausura en torno a la institucionalidad neoliberal ha quedado manifestada durante todos los gobiernos, incluido el actual en funciones.  El fundamentalismo mercantil durante las administraciones de la Concertación y Piñera y las apariencias de reformas durante el actual. En ambos casos, dos estrategias orientadas a un solo objetivo:  la protección del núcleo del modelo, un sistema de intereses dual: fortalece a los grandes grupos económicos y a la cooptada casta política. Unos hacen las leyes y los otros reparten las ganancias. 




Los intentos de llegar a un acuerdo político entre los partidos de Chile Vamos y el gobierno han expresado una obsesiva nostalgia por la democracia de los acuerdos, una fobia hacia la ciudadanía organizada y una incapacidad, que es también desprecio, creativa. Es una reacción patológica que obliga al cierre de puertas y ventanas, al encierro compulsivo y a la reiteración de los mismos actos fallidos como aparentes soluciones. La historia neoliberal chilena instalada en plena dictadura civil militar es circular.

Comportamientos como los que hoy observamos en la clase política podrían corresponder a una personalidad con graves trastornos paranoicos, y en el gobierno aquel síndrome denominado de disonancia cognitiva,  pero también a una estrategia política de alto riesgo que transita por los bordes de nuestra simulada y débil  democracia. Buscar hoy liderazgos es intentar hallarlos al interior de un sistema corrupto que nunca tuvo una verdadera representación. La democracia de los acuerdos que hoy celebran esas elites viajas con las jóvenes, sucumbió hace mucho tiempo a su encierro, a sus propias enfermedades, a sus males internos. Invocar es también llamar a los peores fantasmas de nuestro pasado reciente.

El poder del capital busca con obsesión la regresión conservadora. Lo viene haciendo desde su prensa, desenmascarada nuevamente y convertida en feroces órganos de difusión partidistas que buscan la imposición enceguecida de su proyecto. 

El capital y sus referentes políticos regresan para consolidar la crisis terminal. Sin rutas previstas ni proyectos sociales, el presente tiene como sello, junto a las contradicciones y el desorden, el deterioro, la corrupción y la anomia, mezcla espesa  que cubre todas las instituciones públicas y privadas empujando las contradicciones a límites intolerables. Aquella fusión oscura y pegajosa entre las elites privadas y públicas, entre los controladores de los espacios económicos, políticos, sociales, mediáticos y culturales, ha abierto una brecha insondable entre las ciudadanías y los cada vez más concentrados poderes. Un proceso medido por las estadísticas económicas, que si bien registran niveles de desigualdad propios de sociedades monárquicas o autocráticas, no logran aún constatar el creciente e histórico repudio de la población a sus gobernantes y controladores. 

El pacto por la reforma al sistema de pensiones anunciado el lunes de esta semana ha quemado la última esperanza política. 

 

Paul Walder



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Paul Walder

Periodista

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  1. Felipe Portales says:

    Veo señor Román que ¡usted mismo continúa completamente engañado al sostener que «ellos mismos (los chilenos) mantienen democráticamente (el sistema) con sus votos»! ¡De qué «democracia» está hablando señor Román, cuando los grandes grupos económicos son quienes directa o indirectamente controlan todo el país. Y a tal punto que incluso lo convencen que las «elecciones» que ocurren cada cierto tiempo son «democráticas». De partida no puede haber ninguna democracia efectiva cuando todos los medios masivos de comunicación están controlados -directa o indirectamente- por aquellos grupos y generan -respecto de las características centrales de nuestro modelo de sociedad heredado de la dictadura- un pensamiento único. ¡O no se acuerda que incluso en dictadura había muchísima más pluralidad informativa (en diarios, revistas y radioemisoras) que hoy!…

    • lo ramon roman says:

      Don Felipe, puchas, usted no es mi enemigo político, intelectual o lo que sea, y además no quiero entrar en debates sobre la supuesta propiedad que los chilenos tienen sobre sus razonamientos. Una de las facultades del intelecto humano es saber distinguir entre lo que es bueno o malo para su subsistencia y yo o cualquier ser humanno no necestimos que alguien nos advierta que si ponemos nuestras manos en un horno super caliente nos vamos a quemar, para esto solamente necesitamos que razonemos y nosotros mismos investiguemos si el horno está caliente o no y la mayoría de las veces tenemos que experimentar en nuestras existencias lo que es bueno, malo o dañino para nuestra existencia. Don Felipe, ¿está usted implicando que la mayoría de los chilenos son ESTÚPIDOS porque por un lado están experimentando lo dañino de este sistema y por otro siguen insistiendo en continuar este sistema? ¿Está usted asegurando que la propaganda capitalista es la culpable de que los chilenos sigan con este sistema y no porque los chilenos quieran seguir con ella? Lo repito, todas las elecciones que han habido en Chile, ¿me va a asegurar usted que todos los chilenos van a las urnas como un pelotón de zombies? ¿o es que usted y un número pequeño de chilenos creen que son dueños de la verdad de lo que sucede en Chile y todos los demás son solamente un grupito de vírgenes vestales? El que insulta a los chilenos es usted y su grupito, don Felipe, porque está seguro que la mayoría de los chilenos son pelotudos que actúan de acuerdo a la propaganda capitalista y no porque tienen el derecho democrático de elegir a sus líderes de acuerdo a como ellos lo deciden. Por último, don Felipe, déme su particular definición de Democracia.

    • lo ramon roman says:

      Don Felipe, primero, los grandes grupos económicos controlan todo en Chile, simplemente porque este sistema económico es el Capitalismo y el estado actúa solamente como un árbitro para las medidas capitalistas y no para el pueblo. Segundo, (esto si que es chistoso) Si el pueblo está convencido de que votar cada cierto tiempo es democracia, y si el pueblo sigue votando por los mismos que mantienen este sistema, entonces, si el pueblo está totalmente engañado por la propaganda, luego, explique usted por qué existen tantos partidos politicos diferentes en vez de uno que representaría a un pueblo totalmente engañado? Tercero y último, don Felipe, ¿realmente usted cree que los seres humanos no tienen la facultad de razonar y de cuestionar sus existencias? ¿Usted expresa que el ser humano puede ser obligado a tener UN PENSAMIENTO ÚNICO? Dígame que usted no dijo eso, por favor, don Felipe, por favor, aclare eso. Es decir, don Felipe, explique usted por qué yo y usted diferimos en nuestras opiniones. Addendum, es decir, don Felipe, para usted una dictadura, como la de pinochet, es preferible a una democracia, mala, como las pelotas y como usted la quiera describir, simplemente porque usted considera que la expresión mediática es la unica que debe existir en una democracia, no importa que una dictadura este matando opositores a diestra y siniestra, PERO… HAY LIBERTAD DE LOS MEDIOS DE COMUNICACIÓN, POR LA CH…A, VIVA PINOCHET.

  2. lo ramon roman says:

    Son muy inteligentes estos personajes, politicos y capitalistas, que mantienen este sistema neoliberal y como mantienen con ganancias a «UNA» de sus industrias capitalistas, las AFP. Es decir, los trabajadores y trabajadoras son obligados por ley para «ahorrar» un porcentaje de sus salarios y sueldos en la industria AFP, y estos sueldos y salarios son el CAPITAL que esta industria obtiene para mantener esta industria, y este capital no se mantiene inerte en el bolsillo de los «industriales», no señor, este capital es a su vez invertido en otra inversión capitalista, » el MERCADO DE STOCKS», dónde el dinero invertido puede ganar mucho en poco tiempo, de acuerdo a como el capitalismo crece, o se puede perder todo en un abrir y cerrar de ojos si el capitalismo, en sus ciclos de boom o bust, pierde, o si alguma de las industrias del Mercado se declaran en banca rota, Ahora, veamos como son de zorros estos neoliberales y sus politicos cuando actúan: Si en un momento de descuido intelectual, los politicos le entregan una reforma o parche, a los ahorrantes de las AFP, por ejemplo, que van a beneficiar un poquito a los chilenos, ¿ustedes creen que el gobierno y sus capitalistas van a pagar por estas reformas? ¿Si ustedes creen esto, luego, ustedes son más inocentes que una paloma, Bueno, ¿cómo lo hacen para entregar estos beneficios? Sin que los chilenos se den cuenta, los zorritos suben de apoquito los impuestos, no de los capitalistas, sino de los ciudadanos en general, ya sea subir los impuestos a los salarios, a lo productos alimenticios, etc, es decir, a cualquier producto que los chilenos tengar que comprar, ya sea en comoditis o servicios y presto, todo estos beneficios son pagados por los mismos chilenos que van a recibir estos beneficios.

  3. Felipe Portales says:

    Esperemos que esto, al menos, contribuya a desengañarnos de nuestra actual «centro-izquierda», incluyendo en ésta por cierto al FA y al PC…

    • lo ramon roman says:

      ¿Qué…? No me diga, dor Felipe que usted «todavía’ creía que los que se dicen de izquierda, son de izquierda? Saque conclusiones, don Felipe, si usted, un hombre educado e intelectual todavía estaba engañado, ¿qué esperaba, o espera, usted del promedio de los chilenos que no tienen sus conocimientos? Pero usted, don Felipe, no ha mucho se bajó de su pedestal para retarme porque yo le echaba la culpa a la mayoría de los chilenos por mantener este sistema, cuando, según usted, los chilenos son las victimas de este sistema que ellos mismos mantienen democráticamente con sus votos. ¡ Que paradoja ¡ ¿eh, don Felipe?

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