La Plataforma Internacional por los Derechos Humanos llama a poner fin a las sanciones unilaterales contra Cuba y Venezuela
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La Plataforma Internacional por los Derechos Humanos, una coalición de organizaciones de América, Europa y África, celebró la reciente votación en la Asamblea General de las Naciones Unidas, en la que se aprobó la resolución anual titulada «Necesidad de poner fin al embargo económico, comercial y financiero impuesto por los Estados Unidos de América contra Cuba». Este proyecto de resolución, respaldado el 30 de octubre, insta a respetar la igualdad soberana de los Estados y a cesar las intervenciones en los asuntos internos, además de abogar por la libertad de comercio y navegación internacionales. La resolución fue aprobada con un abrumador apoyo, pues de los 190 países participantes, únicamente Estados Unidos e Israel votaron en contra, mientras que Moldavia se abstuvo.
En su declaración, la Plataforma Internacional por los Derechos Humanos denunció las medidas coercitivas unilaterales como un «crimen contra la Humanidad» y expresó su preocupación por la ineficacia del sistema de Naciones Unidas para frenar estas prácticas. La organización comparó estas sanciones con el conflicto actual en Gaza, señalando que el sistema internacional ha fallado en su misión de proteger los derechos humanos frente a graves abusos. Esta situación, afirman, refleja la necesidad de una profunda reforma en el sistema de la ONU para que cumpla efectivamente con sus objetivos fundacionales.
En cuanto a Venezuela, la Plataforma anticipa que la Asamblea General de las Naciones Unidas pronto abordará las sanciones impuestas por Estados Unidos y la Unión Europea contra el país sudamericano. Desde 2005, Venezuela ha estado sometida a sanciones estadounidenses, las cuales se intensificaron en 2015 y se agravaron entre 2019 y 2020, cuando el Departamento del Tesoro de EE.UU. impuso un embargo petrolero y prohibiciones de transacciones generales con Caracas, afectando además los acuerdos de intercambio y las importaciones de combustible. Actualmente, Venezuela enfrenta 930 medidas coercitivas unilaterales.
En febrero de 2021, Alena Douhan, Relatora Especial de la ONU, exhortó a Estados Unidos y la Unión Europea a levantar estas sanciones, argumentando que han exacerbado las crisis económicas en Venezuela y afectado especialmente a las poblaciones más vulnerables, como personas en extrema pobreza, mujeres, niños, trabajadores de la salud, personas con discapacidades y comunidades indígenas.
Finalmente, la Plataforma Internacional por los Derechos Humanos hizo un llamado a las organizaciones globales de derechos humanos para promover un sistema internacional que proteja efectivamente los derechos de los pueblos y los individuos contra los abusos estatales. En su comunicado, instaron a la creación de un nuevo orden mundial justo e inclusivo que ponga fin a la hegemonía de Estados Unidos y promueva la paz y una convivencia internacional basada en el respeto a los derechos internacionales.