Escalada de violencia: Centenares de misiles iraníes atacan Israel en represalia por la ofensiva de Netanyahu en Líbano
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En una escalada sin precedentes en el conflicto entre Israel e Irán, centenares de misiles iraníes penetraron hoy el espacio aéreo israelí, mientras las defensas antiaéreas intentaban interceptarlos. Este ataque masivo es una respuesta directa a la agresión del gobierno de Benjamin Netanyahu contra el Líbano, en particular contra el grupo Hizbulá, aliado de Irán.
Medios de comunicación israelíes han mostrado imágenes impactantes de los cohetes surcando el cielo, mientras el sistema de defensa antimisiles, conocido como la Cúpula de Hierro, intenta frenarlos. Sin embargo, la Guardia Revolucionaria iraní ha asegurado que los misiles llevaban ojivas de racimo, lo que habría reducido la efectividad del sistema de defensa israelí, permitiendo que varios proyectiles alcanzaran sus objetivos.
Objetivos estratégicos en la mira
Según informes de prensa iraníes, el ataque tuvo como blancos principales tres bases aéreas y una instalación de inteligencia israelí. Esta ofensiva es vista como una represalia por los recientes ataques de Israel en Líbano, que incluyeron la muerte de altos dirigentes del grupo chiita Hizbulá, entre ellos su secretario general, Hassan Nasrallah. La operación militar israelí en suelo libanés, que se ha intensificado en los últimos días, ha generado una respuesta directa de Irán, que considera a Hizbulá un aliado estratégico en la región.
El alcance de los daños y la cantidad exacta de misiles disparados por Irán aún no han sido confirmados, pero las primeras imágenes muestran que el ataque ha tenido un impacto significativo en Israel. Los sistemas antiaéreos han estado activos durante horas, y se espera que en las próximas horas se tenga una evaluación más precisa de los daños ocasionados.
Respuesta regional e internacional
La situación en Oriente Medio ha escalado dramáticamente en las últimas semanas, con Israel lanzando una ofensiva militar en el Líbano que ha incluido ataques selectivos contra líderes de Hizbulá, mientras que el grupo chiita ha intensificado su retórica de resistencia. Irán, por su parte, ha dejado claro que no permitirá la eliminación de sus aliados en la región sin represalias, lo que ha generado una tensión que amenaza con desbordar la región.
La comunidad internacional observa con preocupación esta nueva fase del conflicto, temiendo que la escalada entre Irán e Israel pueda derivar en una guerra abierta que involucre a más actores regionales e internacionales.
Por ahora, las fuerzas israelíes están en alerta máxima y se espera una respuesta militar contundente a los ataques iraníes. En las calles de Israel, la población ha sido instruida para buscar refugio, mientras los medios nacionales se enfocan en informar sobre la evolución del conflicto.
El mundo sigue pendiente del desenlace de esta crisis, que ha puesto a dos potencias regionales en un peligroso juego de acción y represalia que podría tener consecuencias catastróficas para toda la región de Oriente Medio.
