Homenaje a Arnoldo Camu y dirigentes socialistas caídos en la lucha contra la dictadura
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En un emotivo acto realizado en la sede de la Central Unitaria de Trabajadores (CUT), se rindió homenaje al abogado laboralista y dirigente socialista Arnoldo Camu, en el aniversario de su asesinato. El evento recordó también a otros dirigentes sindicales socialistas que fueron víctimas de la dictadura civil-militar debido a su resistencia frente al régimen, destacando los nombres de Víctor Zerega, Joel Huiquiñir y Exequiel Ponce.
La jornada, cargada de simbolismo y memoria, comenzó con los saludos de los presidentes de la CUT y la ANEF, y un mensaje especial de Tania Ponce, hija de Exequiel Ponce, jefe del socialismo en la clandestinidad y dirigente portuario desaparecido desde junio de 1975.
Fidelma Allende, quien fuera alta dirigente de la CUT antes del golpe militar, intervino en el acto, rememorando la fuerza del sindicalismo chileno de aquella época y el rol clave que desempeñó Arnoldo Camu en la obtención de la personalidad jurídica de la CUT. Destacó que Camu fue una figura fundamental en la formación de la Central y en la defensa de los derechos de los trabajadores.
Rolando Calderón Aranguiz, ex Secretario General de la CUT y biministro bajo el gobierno de Salvador Allende, también participó del homenaje, entregando un conmovedor discurso en el que exaltó el coraje de Camu, Zerega, Huiquiñir y Ponce. Calderón señaló que estos cuatro «héroes de los trabajadores» enfrentaron la dictadura armados de convicciones forjadas en las luchas sociales de su tiempo, inspirados por el ejemplo de Salvador Allende, el líder político más grande del movimiento obrero chileno. Subrayó que Allende sigue siendo un ejemplo mundial de consecuencia política.
El cierre del acto estuvo a cargo de Jaime Lorca, director ejecutivo del Centro de Formación Memoria y Futuro y hermano de Carlos Lorca Tobar, ex diputado por Valdivia y dirigente socialista que continúa desaparecido desde la dictadura. Lorca recordó que la lección final de Allende fue clara: el imperialismo estadounidense, aliado con la oligarquía local, fue responsable de las condiciones que permitieron a los militares traicionar su juramento. Añadió que hoy, el imperialismo y su brazo armado, la OTAN, se muestran más agresivos que nunca, intentando controlar América Latina y sus recursos naturales, como el cobre y el litio.
El discurso de Lorca también incluyó un llamado a la necesidad urgente de construir una democracia auténtica en Chile, que termine con el modelo económico neoliberal heredado de la dictadura. Hizo un llamado a la unidad de los movimientos sociales y partidos políticos, insistiendo en que solo a través de la lucha y la movilización será posible un Chile diferente, más inclusivo y justo. Recordó las palabras del presidente Allende: «La historia es nuestra y la hacen los pueblos.»
El homenaje concluyó con los asistentes entonando la emblemática canción El pueblo unido, símbolo de la resistencia y la lucha popular. El evento reunió a familiares, amigos, dirigentes sindicales, jóvenes socialistas y representantes de organizaciones de derechos humanos, quienes rindieron tributo a los caídos con un compromiso renovado por la justicia y la memoria
