Se anuncia una gran inversión en amoniaco verde en Magallanes que potenciará los vehículos a hidrógeno
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El consorcio HNH Energy ingresó a tramitación ante el Servicio de Evaluación Ambiental una iniciativa para producir y exportar amoníaco, en base a hidrógeno verde, con una inversión inicial estimada en US$ 11.000 millones. El consorcio está formado por las firmas austríacas AustriaEnergy y Ökowing, especialista en plantas eólicas, y el fondo de inversión danés Copenhagen Infrastructure Partners.
El proyecto abarcará 1.640 hectáreas en la bahía Gregorio, en la región de Magallanes, y contempla en una planta de procesos la producción de 270.000 toneladas año de hidrógeno verde y de 1 millón de toneladas año de amoníaco verde, además de una planta para producir 175 litros por segundo de agua desalada, un parque eólico de 194 turbinas, un puerto multipropósito y su terminal marítimo de uso mixto para la importación de insumos y la exportación del amoníaco.
Cuando se descompone, el amoniaco verde es un eficiente portador de hidrógeno y puede ser almacenado en condiciones significativamente menos extremas que éste, lo que reduce el costo de las operaciones. Tiene una alta densidad energética, permite un almacenamiento y transporte en recipientes de menores dimensiones en comparación con el hidrógeno. Además, el transporte de amoniaco verde cuenta con una red de distribución ya desarrollada, a diferencia del hidrógeno, que es más inflamable, ganando en seguridad.
La construcción podría comenzar en julio de 2026 y tendría una vida útil de 50 años, en base a las ventajosas características de viento con una energía eólica a bajo costo. La cercanía del mar permite la habilitación de una planta desaladora para el uso de agua, insumo necesario para el proceso de electrólisis en el cual se separan las moléculas de hidrógeno de las de oxígeno. La clave es ahora evaluar adecuadamente el impacto ambiental del conjunto del proyecto.
Esta es una noticia que puede potenciar un eslabonamiento en la producción de vehículos eléctricos con pilas de hidrógeno. Un primer bus a hidrógeno hecho en Chile podría entrar en funcionamiento en 2025, según la revista Nueva Minería y Energía. Se trata de un proyecto que se propone construir el primer bus a hidrógeno desarrollado y fabricado íntegramente en Chile. Cuenta con un presupuesto financiado en partes iguales por CORFO, Anglo American y Colbún y su desarrollo está a cargo de Reborn Electric Motors, una empresa tecnológica chilena ubicada en Rancagua, que cuenta con un equipo de 70 expertos. Ha fabricado más de 100 buses eléctricos y busca ampliar el horizonte de la electromovilidad en Chile.
El bus tendrá una capacidad para transportar 24 pasajeros con una autonomía de 450 kilómetros a una velocidad máxima de 90 km/h y estará equipado con tanques de almacenamiento de pilas de hidrógeno. Estas son un reactor químico en el cual se produce energía eléctrica al combinarse el hidrógeno almacenado en depósitos presurizados con el oxígeno del aire. El producto de esta reacción es electricidad, la que se emplea para alimentar los motores de tracción y la red eléctrica de un vehículo y, por otro lado, agua, que se emite a la atmósfera en forma de vapor. En vez de tener la energía eléctrica almacenada en una batería, estos vehículos almacenan la energía en forma de hidrógeno para luego hacerlo reaccionar en la pila de combustible.
Es un sistema que tiene ventajas respecto a las baterías, que son pesadas, requieren del uso de materiales escasos y caros para su fabricación, tienen un reciclaje complicado, envejecen y las recargas son lentas, mientras la extracción de litio con que funcionan tiene efectos ambientales en los salares en que se encuentra. No obstante, se requiere de más energía eléctrica para producir el hidrógeno que la que luego se puede producir en la pila de combustible con ese mismo hidrógeno. Paradojalmente, esto pone a Chile en ventaja para producir hidrógeno verde a menores costos con los recursos abundantes de viento en el extremo sur y de radiación en el norte, especialmente con almacenamiento en amoniaco verde. Por ahora, la producción de pilas de hidrógeno es más cara que la de baterías de ion-litio.
Entre tanto, la hoja de ruta de Reborn Electric Motors contempla todas las etapas de construcción del bus a hidrógeno a nivel local, desde los diseños de ingeniería hasta la validación comercial del modelo. El bus será destinado a operar en entornos cotidianos -incluyendo rutas en la vía pública- y se espera que también sea utilizado en escuelas y universidades para fomentar la transferencia tecnológica y su escalabilidad futura.
Jocelyn Olivari, gerenta de Innovación de Corfo, indicó que “este tipo de proyectos da cuenta de las excelentes capacidades técnicas que tenemos en regiones para diversificar y sofisticar nuestra matriz productiva a través de innovaciones tecnológicas de frontera”.
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