Poder y Política

Fue por lana y salió trasquilado: cuando Marcel le enrostró a la CMPC la colusión del papel tissue

Tiempo de lectura aprox: 2 minutos, 30 segundos

“En el caso de una empresa que protagonizó uno de los episodios más graves de colusión en Chile, uno esperaría un poco más de prudencia y compromiso por el país”, dijo este miércoles el ministro de Hacienda, Mario Marcel, en respuesta a las prepotentes declaraciones del presidente de la CMPC, Luis Felipe Gazitúa.

Recordemos que Gazitúa dijo durante el encuentro empresarial Irade, en la ciudad de Los Angeles, en Bío Bío, y frente al ministro de Economía, Nicolás Grau, que en Chile era «imposible hacer proyectos». Según el empresario, en otros países latinoamericanos, a pesar de tener un nivel de desarrollo menor que Chile, existe un claro convencimiento por parte de las autoridades públicas de que la industria privada es un factor crucial para el desarrollo.

Gazitúa fue por lana y salió trasquilado. Marcel le enrostró uno de los escándalos mayores conocidos en la escena neoliberal chilena. De libre mercado, nada. La colusión conocida como del papel tissue, que estalló el 2015, fue ampliamente difundida por la prensa y los matinales de televisión. Para la audiencia, esta empresa, que pertenece a la profunda y rancia oligarquía chilena, como es la familia Matte, había estafado a sus consumidores por más de diez años en un producto tan popular, sensible e íntimo como el papel higiénico. Los memes proliferaron y el empresariado chileno volvió a ocupar el rincón al que siempre había pertenecido pese al blanqueamiento del marketing neoliberal. Para diversos analistas hechos como estos fueron parte de los motivos que impulsaron pocos años más tarde la revuelta popular de octubre del 2019.

 

De qué se trababa la colusión del papel

Este caso de colusión, que se sumaba a otros como la carne de ave, las farmacias además de SQM y Penta, saltó a la luz pública en octubre del 2015 cuando la Fiscalía Nacional Económica presentó ante el Tribunal De la Libre Competencia  un requerimiento contra las empresas CMPC Tissue, del grupo Matte, y la sueca SCA Chile  por la creación de un cartel para asignarse cuotas de mercado y fijar precios del papel tissue entre el año 2000 y el 2011. Las dos empresas denunciadas tenían entonces casi el 90 por ciento del mercado y unas ventas anuales por más de 400 millones de dólares de la época en sus marcas Confort, Elite, Nova, Noble y Orquídea, en el caso de CMPC, y Favorita y Magiklin, en el de SCA.




Durante la investigación, la Fiscalía detectó el modo de operación de los ejecutivos de las empresas. Por ejemplo, “está acreditado que los ejecutivos que gestionaron los acuerdos evitaron traspasar información en formato digital o por correo electrónico institucional, por lo que preferían el uso de documentos impresos y cuentas de correo electrónico personales para estos fines. Al mismo tiempo, utilizaron teléfonos celulares de prepago para comunicarse con la competencia y representantes de una de estas empresas admitieron que llegaron a deshacerse de computadores”, los cuales arrojaron al Canal San Carlos de Santiago.

Para la persecutora, éste fue uno de los mayores casos de colusión detectados en el país. “Su gravedad radica tanto en su extensión en el tiempo como en la masividad del mercado que afectó y la casi nula sustitución de estos productos”. Podemos agregar que también involucra a uno de los grupos económicos más antiguos, presentes en sectores clave de la economía y con un poder político ingente.

Ambas empresas, tal como otros casos de colusión, cohecho y soborno investigados por la justicia, pertenecen o han pertenecido a la oligarquía chilena. Por un lado está la CMPC, nave insignia del grupo Matte, y PISA (vendida el 2003 a la sueca SCA), propiedad hasta la fecha de su venta de Gabriel Ruiz Tagle, millonario funcionario del gobierno de Sebastián Piñera, miembro de la UDI y con negocios en el fútbol.

La otra cara del cartel es más antigua, más conocida y más activa en la historia de Chile. El grupo Matte, cuyos rostros más visibles son los hermanos Eliodoro y Bernardo,  desde muy jóvenes figuras clave en campañas de desestabilización política y más tarde férreos defensores de la dictadura, inscribe su historia junto a la del país.  Desde su corporación, la CMPC, se encubrieron asesinatos a trabajadores de la empresa partidarios del gobierno de Salvador Allende en tanto la socióloga Patricia Matte, otra de las figuras de este linaje, fue una destacada funcionaria del gobierno de Pinochet. Así es Chile.

 

Paul Walder



Foto del avatar

Paul Walder

Periodista

Related Posts

  1. Margarita Labarca Goddard says:

    Estoy de acuerdo con el artículo. Pero aunque tú no lo creas, hay gente de otros países o jóvenes hijos de chilenos que ni conocen Chile, que leen el Clarin. Y para esa gente sería bueno qu al menos en alguna parte del artículo se dijera que CMPC es la Compañía Manufacturera de Papeles y Cartones. Pues debo suponer que es eso ¿no? Hasta a mí me costó entenderlo porque cuando yo vivía en Chile no se decía tan simplemente CMPC.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *