Conversatorio “Perdidos, pero no olvidados” en el Museo de la Memoria
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El conversatorio “Perdidos, pero no olvidados. Reflexiones sobre las desapariciones en dictadura de Boris Weisfeiler Bernstein y la de Maarten Visser” se realizará mañana a mediodía en el Museo de la Memoria y los Derechos Humanos.
El tema del conversatorio es la desaparición del matemático ruso, nacionalizado norteamericano y de origen judío, Boris Weisfeiler Bernstein y la de Maarten Visser quienes desaparecieron el año 1985 en circunstancias no aclaradas hasta ahora.
El 4 de enero de 1985, Boris Weisfeiler Bernstein desapareció en la confluencia de los ríos Ñuble y Los Sauces perdiéndose su rastro cuando se acercó peligrosamente a los deslindes de Colonia Dignidad.
Igualmente, la publicación de la investigación acerca del caso Weisfeiler efectuada por el periodista Carlos Basso en el libro “El Ultimo Secreto de Colonia Dignidad” puso en conocimiento público la insólita desaparición de un ciudadano norteamericano en Chile.
Ya había un antecedente previo en el caso del periodista Charles Horman, desaparecido pocos días después del golpe militar, hecho que se hizo mundialmente célebre a través de la película “Missing” del director Costa Gavras.
En cambio, el caso Boris Weisfeiler permanece, hasta hoy, prácticamente ignorado por los chilenos. A fin de despertar la conciencia nacional e informarse en forma oficial de lo acontecido con su hermano, Olga ha viajado dos veces a nuestro país.
Boris era una persona muy querida. Hasta hoy, cada mes de abril, fecha de su cumpleaños, celebran una comida en su recuerdo sus amigos y colegas del Instituto de Estudios Avanzados de la prestigiosa Universidad de Princenton, donde Weisfeiler era académico.
Por otra parte, Maarten Visser llegó a Chile el 9 de diciembre de 1985 con 18 años. Lo atrajeron las maravillas del sur, especialmente el volcán Osorno. Ese lunes alojó en Puerto Montt en casa de María Torres y Luis Higueras.
El martes se enfrascó en una discusión con los dueños porque criticó al régimen de Pinochet y el tipo de Estado policial que percibió en esas pocas horas. Nada serio, al parecer. El miércoles viajó hasta el refugio Teski del volcán y salió a excursionar, con ropa de calle. Sus pertenencias eran mínimas.
En Puerto Montt dejó algunas cosas, pues regresaría pronto, dijo. Pero no volvió más. Todo se asemejó a un accidente. Permanentemente el volcán cobra la vida de los inexpertos que se aventuran en sus zonas más delicadas. Con Maarten, hasta ahora, han desaparecido seis personas en el nevado.
Hasta ahora, los antecedentes del proceso no aportan pistas para establecer responsabilidad de terceros. En los padres ronda el fantasma del secuestro.
Cuando Fifi Visser tenía 16 años a su hermano mayor se le dio por desaparecido en el Chile de Pinochet. Maarten estaba mochileando en el sur, nunca volvió del Volcán Osorno. Continuamente, entre esperanza y temor, sus padres han viajado a Chile a buscar a su hijo.
Y, una vez más, el espectro se parece a Colonia Dignidad, definida en varios procesos penales en Chile como una asociación ilícita. Una secta de “beneficencia” que desde 1961 encubrió objetivos criminales, con más de 70 procesos en su contra.
Durante la dictadura, tras sus alambradas, la DINA y la CNI escondieron prisioneros, instruyeron a sus agentes, y oficiales de toda gama y civiles encontraron la paz de la tarde y los manjares alemanes, de todo tipo, para vacacionar.
El caso de Maarten, extraviado desde el 12 de diciembre de 1985, forma parte del informe Rettig desde la década del 90, sin embargo, nunca fue sindicado como un hecho de violación a los derechos humanos durante la dictadura.
Este jueves a mediodía el panel del conversatorio estará compuesto por la periodista investigadora Pascale Bonnefoy; por el abogado y presidente del directorio del MDH Patricio Zapata y Sandro Gaete, analista del área de coordinación y búsqueda del programa de DDHH. Moderará el panel la periodista Matilde Burgos.