In Memoriam: Muere Joan Jara, bailarina, activista y legado de resistencia
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La tarde de este domingo, el mundo perdió a una figura icónica: Joan Jara, conocida bailarina y incansable activista política británica, falleció a la edad de 96 años. Su legado trasciende las fronteras de la danza y la política, marcando un capítulo importante en la historia de Chile y los derechos humanos.
La noticia fue confirmada por la Fundación Víctor Jara a través de sus redes sociales, lamentando la pérdida de «nuestra querida y amada Joan Jara». La bailarina, reconocida por la Academia Chilena de Bellas Artes por su destacado aporte a la danza, deja un vacío en el corazón de quienes admiraban su valentía y dedicación.
Joan Jara, viuda del cantautor Víctor Jara, asesinado durante la dictadura militar en Chile, fue una defensora incansable de los derechos humanos y una figura clave en la búsqueda de la verdad detrás del crimen de su esposo. Su vida estuvo marcada por el exilio, la lucha y la construcción de un legado que perdurará en la memoria colectiva.
Nacida en Londres el 20 de julio de 1927, Joan Turner, (su apellido de soltera) llegó a Chile para integrarse al Ballet Nacional Chileno, destacándose como solista. Su contribución a la danza la llevó a ser reconocida con el Premio Nacional de Artes de la Representación y Audiovisuales de Chile en 2021, un merecido reconocimiento a una carrera dedicada al arte y la formación de nuevas generaciones de bailarines.
Después del Golpe de Estado de 1973 y el asesinato de su esposo, Joan Jara regresó a Inglaterra, donde comenzó su labor como defensora de los Derechos Humanos. Sin embargo, su espíritu indomable la trajo de vuelta a Chile a principios de los años 80. En colaboración con Patricio Bunster, su expareja, fundó el Centro de Danza Espiral en Santiago, una institución clave en la formación de bailarines y coreógrafos, especialmente en barrios populares.
Joan Jara también dejó un impacto significativo en la educación, siendo profesora de danza en la Universidad de Chile y creadora de la primera carrera de Pedagogía en danza infantil en dicha institución.
Su activismo por los derechos humanos la llevó a la creación de la Fundación Víctor Jara en 1993, con el objetivo de difundir y preservar el legado artístico de su difunto esposo. Además, participó en la creación del Grupo de Danza Calaucán en Concepción, contribuyendo al florecimiento cultural en la región.
Nacionalizada chilena por gracia en 2009 durante el primer Gobierno de Michelle Bachelet, Joan Jara deja un importante legado en el ámbito político y cultural del país. Su vida fue una mezcla de arte, resistencia y amor por la verdad, y su memoria continuará inspirando a generaciones venideras a luchar por la justicia y los derechos fundamentales. En este momento de pérdida, recordamos y honramos a Joan Jara, una verdadera pionera y defensora de la libertad.