Ministra Vallejo acusa las acciones de la derecha de «retroceso civilizatorio»
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En medio de la controversia suscitada tras la aprobación de la lectura de la declaración de 1973 en contra del expresidente Salvador Allende en la Cámara de Diputados, la ministra vocera de Gobierno, Camila Vallejo, ha expresado contundentes reflexiones acerca de la importancia de preservar la democracia y evitar justificaciones que puedan legitimar rupturas democráticas.
Un Llamado a la Reflexión
Bajo la expresión de «Un retroceso civilizatorio», la ministra Camila Vallejo ha señalado que no se debe avalar ni buscar argumentos que respalden la ruptura democrática, independientemente de las diferencias políticas que puedan existir. Vallejo resalta que es preocupante que se introduzcan en el debate público argumentos que sugieran razones que condujeron a un golpe de Estado.
La ministra, quien emitió estas declaraciones luego de una visita a San José de Maipo, ha hecho un llamado a todas las fuerzas políticas a cuidar y proteger la democracia, subrayando la importancia de no intentar reescribir la historia en base a justificaciones que puedan poner en riesgo la estabilidad democrática.
La polémica surgió en la Cámara de Diputados cuando se leyó una resolución parlamentaria de 1973 que calificaba de inconstitucional el Gobierno democrático de Salvador Allende. Este texto fue utilizado durante décadas como un sustento jurídico para justificar el golpe militar de 1973, que desencadenó en una dictadura liderada por el general Augusto Pinochet y causó la muerte de más de 3.000 opositores.
La lectura de esta resolución generó tensión en el hemiciclo y provocó la reacción de diputados de izquierda, quienes abandonaron la sala acusando a los partidos de oposición de negacionismo histórico. La situación resalta la sensibilidad y la importancia de abordar con responsabilidad el pasado y su impacto en el presente.
La Protección de la Democracia
Siguiendo la línea de la ministra Vallejo, el jefe de la bancada de diputados del PS, Daniel Manouchehri, destacó que justificar lo ocurrido en el pasado podría sugerir que se estaría dispuesto a repetirlo en la actualidad. Este llamado a la reflexión es una invitación a la derecha política a condenar de manera firme y clara las violaciones a los derechos humanos ocurridas en ese periodo.
Las declaraciones de la ministra Camila Vallejo no solo arrojan luz sobre la importancia de proteger y preservar la democracia, sino que también subrayan la relevancia de enfrentar el pasado con honestidad y empatía. La discusión sobre la lectura de la declaración de 1973 nos recuerda que la historia no debe ser manipulada con fines políticos y que las lecciones del pasado deben guiar nuestro compromiso con una sociedad justa y democrática.
