Abogado Avila solicita al Senado revisar supuestas irregularidades en reciente fallo contra Cristián Labbé

En carta al presidente del Senado,  Alvaro Elizalde, el abogado Roberto Avila Toledo, se refiere al reciente fallo de la Corte Suprema contra el coronel del ejército Cristián Labbé que confirmó la sentencia condenatoria del acusado pero teniendo en consideración su edad  se le concedió la gracia de la pena remitida, por tres votos contra dos. Esto, dice Avila,  es abrir la puerta a la impunidad de par en par en los crímenes de la dictadura militar.

El punto es que concurrió a este fallo Doña Dobra Lusic,  ministra de la Corte de Apelaciones de Santiago y en fechas muy recientes el Senado rechazó que la ministra Lusic fuera ascendida a ministra de la Corte Suprema. «Sin embargo en un caso relevante como el que he señalado la Corte Suprema decidió que la sala penal fuera integrada por la citada ministra que es a todas luces contradecir en los hechos y con los efectos que se aprecian la voluntad del Senado de la república en el sentido que la ministra no impartiera justicia en la Excelentísima Corte Suprema. Como usted podrá apreciar la voluntad del Senado ha quedado manifiestamente burlada por la vía de una integración en sala que contradice la voluntad y las potestades constitucionales del Senado de la república».

 

Señor Álvaro Elizalde

Presidente del Senado

República de Chile

Estimado senador:

En mi calidad de ciudadano de la República de Chile vengo en darle a conocer una situación que afecta gravemente  las funciones y competencias del Senado que usted preside.

Formularle una petición que dice relación con  la causa rol 72032- 2020 que se resolvió y tramitó en la Corte Suprema hace algunos días.

En ella se concedió al coronel en retiro del ejército Don Cristian Labbé, ex oficial del ejército y de la Dina, ex jefe de escolta del dictador Augusto Pinochet y ex ministro de ese gobierno de facto que la sentencia a tres años de prisión efectiva a que venía condenado por torturas la cumplirá bajo la modalidad de remisión condicional de la pena; esto es simplemente firmando un libro.

Con esta resolución que no fue pedida ni siquiera por los abogados de la defensa del coronel se revocó la sentencia de primera instancia del ministro en visita Don Álvaro Meza Latorre y de la Corte de Apelaciones de Temuco que condenaron al ex agente de la Dina a 3 años de presidio efectivo.

Se confirmó la sentencia condenatoria del acusado pero teniendo en consideración “lo viejito” de este se concedió esta gracia, por tres votos contra dos. No escapará a su percepción que esto es abrir la puerta a la impunidad de par en par en los crímenes de la dictadura militar.

Concurrió a este fallo Doña Dobra Lusic, ella es ministra de la Corte de Apelaciones de Santiago y en fechas muy recientes el Senado que usted preside rechazó, por consideraciones que no viene el caso traer nuevamente a colación, que esta ministra de la Corte de Apelaciones de Santiago fuera ascendida a ministra de la Corte Suprema. Sin embargo en un caso relevante como el que he señalado la Corte Suprema decidió que la sala penal fuera integrada por la citada ministra que es a todas luces contradecir en los hechos y con los efectos que se aprecian la voluntad del Senado de la república en el sentido que la ministra no impartiera justicia en la Excelentísima Corte Suprema.

Como usted podrá apreciar la voluntad del Senado ha quedado manifiestamente burlada por la vía de una integración en sala que contradice la voluntad y las potestades constitucionales del Senado de la república.

Visto lo anterior Solicito a usted que se forme una comisión investigadora, en la instancia correspondiente, para este hecho que ha significado una pública vulneración de las potestades del Senado.

Mi solicitud no implica que el Senado se aboque a revisar los contenidos de un proceso judicial sino que establezca e indague las razones del porqué una ministra rechazada por el Senado para impartir justicia en la Corte Suprema termina de todas maneras haciéndolo.

Se despide de usted con los testimonios de mi más alta consideración y estima.

Roberto Ávila Toledo

Abogado