Senador Núñez: “El acuerdo tiene limitaciones, pero es un costo necesario ante el veto que ejerció la derecha”
Tiempo de lectura aprox: 56 segundos
El parlamentario por la Región de Coquimbo valoró que se mantengan los principios de delegados electos, equidad de género y escaños para pueblos originarios.
Tras la firma del “Acuerdo por Chile” que establece las bases para un nuevo proceso constituyente y que fue ratificado por la mayoría de los partidos políticos con representación, el senador por la Región de Coquimbo, Daniel Núñez, entregó su visión.
El congresista coincidió con las palabras expuestas por el Presidente Gabriel Boric hace unos días, señalando que “es mejor un acuerdo imperfecto que no tener acuerdo”.
“En el escenario en el que estamos hoy día, donde las fuerzas democráticas están pagando los costos de la derrota que sufrimos el 4 de septiembre, es evidente que cualquier acuerdo en estas condiciones iba a ser y este acuerdo también es imperfecto, por lo tanto no representa nuestra aspiraciones, nuestra demanda, nuestro sentir de lo que debe ser un proceso con una soberanía popular plena y desde ese punto de vista tiene limitaciones que son relevantes, pero es un costo necesario que hubo que pagar por el veto que ejerció la derecha en distintos aspectos”, indicó el parlamentario electo con la primera mayoría regional.
Al mismo tiempo, Núñez valoró poder “mantener dos principios que son fundamentales, el primero es que deben haber delegados y delegadas 100 por ciento electos por la ciudadanía, que es algo fundamental, y lo segundo es que se respetan principios que son también muy relevantes, como son la equidad de género, la paridad y la presencia de escaños reservados para los pueblos originarios, me parece que son dos principios que en este acuerdo están respetados y nos parece tremendamente valorable”.
Felipe Portales says:
¡El senador parece no darse cuenta que este no es un acuerdo imperfecto, sino que es un acuerdo perfecto… para las derechas! Harán todo el «trabajo», para entregárselo a un grupo de elegidos por el pueblo que aparecerán haciéndolo. Y para rematar la farsa, terminar con un «plebiscito»…
Serafín Rodríguez says:
Lo que está claro es que los límites de lo políticamente posible los determinan los poderes reales y efectivos que rigen en la sociedad, todos los cuales tienen fuertes bases económicas, sociológicas y culturales. Eso de que «quise pero no me dejaron» no es más que una excusa —por lo demás bien conocida y practicada por los gobiernos chilenos de seudo izquierda— para justificar el fracaso de hacer política pequeño-burguesa de cúpulas que beneficia principalmente a quienes la practican con las prebendas que les ofrece el sistema. Todo esto, en vez de enfocarse en el desarrollo y fortalecimiento de un movimiento político-social en que la ciudadanía organizada juegue un papel determinante, un movimiento que pueda generar sus propios representantes, ejercer presión sobre los mencionados poderes y eventualmente forzar los cambios que el país requiere. Para mencionar algo que de alguna manera u otra se ha transformado —metafóricamente hablando— en norma de conducta de las seudo izquierdas chilenas, sentarse a la mesa de Rockefeller no ayuda:
https://verdadahora.cl/la_cena_que_pago_rockefeller_al_presidente_del_partido_comunista.html