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Migrar mata: más de 50.000 las muertes documentadas durante la migración en todo el mundo

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Más de 50.000 personas en todo el mundo han perdido la vida durante sus viajes migratorios desde que el Proyecto Migrantes Desaparecidos de la OIM comenzó a documentar las muertes en 2014, según un nuevo informe de la OIM publicado estos últimos días. A pesar de la creciente pérdida de vidas, los gobiernos de los países de origen, tránsito y destino han tomado pocas medidas para abordar la actual crisis mundial de migrantes desaparecidos.

“Si bien se han documentado miles de muertes en las rutas migratorias cada año, se ha hecho muy poco para abordar las consecuencias de estas tragedias, y mucho menos para prevenirlas”, dice Julia Black, coautora del informe publicado por la Organización Internacional de la Migración (OIM). “Independientemente de las razones que obliguen o impulsen a las personas a mudarse, nadie merece morir en busca de una vida mejor”.

Más de 30.000 personas en los registros del Proyecto Migrantes Desaparecidos son de nacionalidad desconocida. Eso indica que más del 60 por ciento de las personas que mueren en las rutas migratorias permanecen sin identificar: lo que deja a miles de familias en busca de respuestas.

“Con el paso del tiempo, no hay noticias”, dijo un migrante marroquí en España a la OIM en 2021 mientras buscaba a su hermano desaparecido hace 20 años camino a Europa. “Solo queremos saber si está vivo o muerto. Sólo queremos saber algo”.




De los migrantes desaparecidos cuya nacionalidad pudo identificarse, más de 9.000 eran de naciones africanas, más de 6.500 eran de Asia y otros 3.000 eran de las Américas. En particular, los tres principales países de origen (Afganistán, Siria y Myanmar) están marcados por la violencia, con muchas personas que huyen de sus hogares para buscar refugio en el extranjero.

Más de la mitad de las 50.000 muertes individuales documentadas ocurrieron en rutas hacia y dentro de Europa, y las rutas del Mediterráneo se cobraron al menos 25.104 vidas.

Las rutas europeas también representan el mayor número total y proporción de personas desaparecidas y presuntamente muertas con al menos 16.032 desaparecidos registrados en el mar cuyos restos nunca fueron recuperados.

  • África es la segunda región más mortífera para las personas en movimiento, con más de 9.000 muertes durante la migración documentadas en el continente desde 2014. Sin embargo, las encuestas regionales de hogares indican que estas cifras son casi con toda seguridad un recuento insuficiente.
  • Se han documentado cerca de 7.000 muertes en las Américas, la mayoría en rutas a los Estados Unidos (4.694). Solo el cruce fronterizo terrestre entre Estados Unidos y México es el sitio de más de 4,000 muertes desde 2014.
  • Se han documentado otras 6.200 muertes en toda Asia. Los niños representan más del 11 por ciento de las vidas perdidas en las rutas migratorias en Asia, la proporción más alta de cualquier región. De las 717 muertes de niños registradas durante la migración en la región, más de la mitad (436) son refugiados rohingya.
  • En Asia occidental, se han perdido al menos 1.315 vidas en las rutas migratorias, muchas de las cuales ocurren en países con conflictos en curso que hacen que la documentación de los migrantes desaparecidos sea extremadamente difícil. Al menos 522 personas que llegaron desde el Cuerno de África han muerto en Yemen, a menudo debido a la violencia, y se han documentado las muertes de 264 sirios durante los intentos de cruzar la frontera hacia Türkiye.

 

“Hacemos hincapié en que las obligaciones en virtud del derecho internacional, incluido el derecho a la vida, deben respetarse en todo momento. Necesitamos trabajar juntos para prevenir y reducir más muertes priorizando las operaciones de búsqueda y rescate, mejorando y ampliando las vías de migración regulares y seguras, y asegurando que la gobernanza de la migración priorice la protección y la seguridad de las personas en movimiento”, exhorta la OIM en su informe.



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Elena Rusca

Periodista, corresponsal en Ginebra

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