Continúan en Panamá protestas contra el alto costo de la vida
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De acuerdo con el docente Mario Almanza, uno de los voceros de la alianza Pueblo Unido por la Vida,protagonista de marchas y concentraciones populares en la capital y las 10 provincias, se mantendrán en las calles hasta que el Gobierno convoque a una mesa única de diálogo serio y con respuestas a sus demandas.
“Se debe convocar urgente a todos los actores sociales que participan en las protestas, sin exclusión“, enfatizó el también secretario general del Sindicato Nacional de los Trabajadores de la Educación.
Entre los principales reclamos sobresale la reducción y congelamiento de los precios galopantes del combustible, los alimentos, medicamentos y la tarifa eléctrica.
También exigen aumento general del salario y que se destine al menos el seis por ciento del producto Interno Bruto al sistema educativo.
La víspera, con el objetivo de frenar la huelga generalizada en todo el istmo y que ya impacta en el desabastecimiento de productos del agro en los mercados, sobre todo de la capital, el Consejo de Gabinete aprobó rebajar a 3,25 dólares el galón (3,78 litros) de la gasolina y el diésel, medida que no satisface a los manifestantes.
Según un comunicado oficial, el Ejecutivo contempló 200 millones de dólares para estabilizar temporalmente el costo de los carburantes, pero los movimientos populares demandan que los recursos provengan del control a las ganancias de los importadores y no de los impuestos que pagan los panameños.
Los sectores en lucha en las calles exigen además que se acabe con la corrupción, el nepotismo y el clientelismo político que signa a los poderes Ejecutivo y Legislativo, así como rechazan el modelo económico neoliberal que defiende la administración de Laurentino Cortizo y abogan por su cambio.
Dirigentes de la alianza Pueblo Unido por la Vida sostuvieron la víspera un encuentro con el arzobispo de Panamá, monseñor José Domingo Ulloa, quien se brindó como facilitador de la mesa única de diálogo.
La cual, según esperan, sume a todas las organizaciones, entre ellas la Alianza Nacional por los Derechos del Pueblo Organizado (Anadepo), con sede en la provincia de Veraguas.
En la jornada, dirigentes de Anadepo como Luis Sánchez; y por la alianza Pueblo Unido por la Vida, Fernando Ábrego; junto a las autoridades de los pueblos originarios, anunciaron al país que acordaron conformar un solo bloque para encabezar el enfrentamiento al Ejecutivo en demanda de justicia social.
Fuente: Prensa Latina