Corte de Apelaciones de Concepción deja en libertad a imputados de la muerte de Yordan Llempi

La Corte de Apelaciones de Concepción acogió este jueves el recurso de amparo que presentó la defensa de los dos marinos imputados en la muerte del comunero mapuche Yordan Llempi, revirtiendo la medida cautelar de arresto domiciliario total que se había impuesto.

La quinta sala del tribunal de Alzada, por decisión dividida, revocó la resolución impuesta por la sexta sala de la Corte de Apelaciones de concepción, en la cual, se había decidido que ambos inculpados – Luis Felipe Videla Cid y Ricardo Yordan Seguel San Martín – eran un peligro para la sociedad y era necesaria la medida de arresto domiciliario.

El fallo sostiene que “Se puede concluir que solamente cuentan con una argumentación formal o apariencia de motivación, pero que no aportan reales fundamentos fácticos y jurídicos que sustenten la decisión adoptada y que resulten suficientes para comprender a cabalidad la decisión a que arriban y su suficiencia para revertir lo resuelto por el juez de garantía”

La resolución también agrega que “la resolución impugnada carece del estándar para revocar y decretar la medida cautelar de privación total de libertad en sus domicilios. Ello la hace devenir en arbitraria, a la vez que el incumplimiento de lo ordenado por la Constitución y la ley procesal penal, la convierte en ilegal”.

Finalmente, la Corte informaba que iban a acoger el amparo para anular la audiencia realizada el 8 de junio, pidiendo que se diera la libertad a los amparados y que, además, se realizara una nueva audiencia.

Muerte de Yordan LLempi

El pasado 3 de noviembre del 2021, el comunero mapuche Yordan Llempi se encontraba en su hogar, localizada en el sector de San Miguel en la comuna de Arauco, cuando sufrió un impacto de bala que terminó por causarle la muerte.

El suceso ocurrió después de que funcionarios de carabineros solicitaran la ayuda de la infantería marina, por una lucha armada contra un grupo de personas que intentaban evitar el arresto del hermano de la víctima, José Nicolás LLempi, quien había sido detenido por posesión de un auto robado y armamento.

Al escuchar los disparos, Llempi habría salido de la casa para esconderse en una bodega encontrada en la parte trasera de esta, pero antes de poder llegar sería interceptado por una bala disparada desde un fusil de guerra. Cabe destacar que el comunero iba desarmado.

Tanto el cabo primero que produjo el disparo, Ricardo Seguel, y el teniente encargado de ordenar los disparos, Luis Videla, tenían instrucciones de disparar las armas evitando dar en zonas letales.

Ambos funcionarios inculpados del delito fueron detenidos gracias a una indagación hecha por la Brigada de Homicidios y de peritajes del laboratorio de Criminalística de la PDI.