Sahara Occidental en el Consejo de Seguridad: todo cambia… ¿Para que nada cambie?
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Se reúne hoy el Consejo de Seguridad de la ONU, en la sede de Nueva York, para una serie de consultas y discusiones sobre la situación en el Sáhara Occidental: al programa, la situación de la MINURSO, el informe del nuevo secretario general por el Sahara Occidental, Staffan de Mistura, las consecuencias de la nueva posición de los españoles y las recientes resoluciones adoptadas por el TJUE que concluyeron con importantes decisiones sobre el conflicto, anulando los acuerdos de asociación UE-Marruecos por incluir ilegalmente los territorios del Sáhara Occidental.
Es Staffan De Mistura la nueva figura que se reúne hoy alrededor de la mesa para discutir sobre la situación de los territorios del Sahara Occidental.
Mistura sucede a Horst Köhler, de Alemania, que completó su misión el 22 de mayo de 2019. El nuevo Enviado debe trabajar con todos los interlocutores pertinentes, incluidas las partes, los países vecinos y otras partes interesadas, guiándose por la resolución 2548 (2020) del Consejo de Seguridad y otras resoluciones pertinentes. Su objetivo: lograr un proceso de paz y un referéndum que certifique el derecho a la libre determinación del pueblo del Sahara Occidental. Hasta el día de hoy, este territorio no está considerado como “autónomo” por la ONU a pesar de haberse constituido como República.
El Sahara Occidental, también llamada como “la última colonia de África”, busca ser descolonizado a través del ejercicio del derecho a la autodeterminación. Es decir, a través de un referéndum que es exigido por el pueblo saharaui desde 1991.
Hace casi 30 años, la ONU creó una Misión de las Naciones Unidas para el Referéndum del Sáhara Occidental (MINURSO). Sin embargo, no ha logrado finalizar dicho referéndum. Su objetivo en esa república es, sobre todo, impedir otro conflicto bélico. Desafortunadamente, tampoco pudo impedir esa segunda opción.
Da Mistura no dio fecha para su próximo viaje a los territorios saharauis, aunque señaló que será «pronto», ni precisó si incluirá en esta ocasión el territorio saharaui, pues en su gira anterior solo estuvo en los campamentos de refugiados del Frente Polisario en la localidad argelina de Tinduf.
En este momento, el problema de principio es que la vuelta misma a la mesa de negociaciones, sin entrar en su contenido, se antoja difícil, porque Marruecos exige que Argelia participe en ella como parte del conflicto y no como mera observadora, y esto en un momento en que ambos países han roto sus relaciones diplomáticas.
El día 13 de noviembre 2020 Marruecos salió de la zona buffer prohibida para los ejércitos para desalojar a los manifestantes Civiles Saharaui. En ese periodo, decenas de saharauis habían organizado una acampada en la zona conocida como Guerguerat. En esta zona se encuentra la brecha ilegal abierta por la ocupación marroquí y por la cual pasan miles de vehículos a diario con mercancías para vender en todo África, además de ser uno de los principales puntos desde los cuales las mafias trafican con las drogas procedentes de Marruecos y las mueven por todo el continente.
Desde que los marroquís atacaron los manifestantes saharauis, empezó de nuevo la guerra por la liberación del Sahara Occidental. Muchos países llaman ahora al cese del alto al fuego, los mismos que, durante 29 años de Acuerdos de Paz, pillaron los recursos naturales del Sahara Occidental.
¿Una razón más para que España traicione al Sahara Occidental?
El último informe de la Asociación para el Monitoreo de los Recursos Naturales y la Protección del Medio Ambiente del Sahara Occidental (AREN) reveló que el Reino de Marruecos, potencia ocupante del Sáhara Occidental, ha aumentado la comercialización ilegal de fosfatos en un 114 por ciento respecto al primer trimestre de 2021, lo que supone un “aumento peligroso” según advierte la institución saharaui.
El informe recientemente publicado por la organización desvela que el saqueo de los fosfatos saharauis experimentó un “grave aumento” en 2022, duplicando con creces las cifras del ejercicio anterior, al ascender a “470.889 toneladas frente a las 220.000 toneladas del primer trimestre de 2021”.
El informe indicó que la ocupación marroquí explotó la situación en Ucrania para aumentar las exportaciones de fosfato. Empresas transnacionales de 39 países están actualmente explotando a esos recursos.
En esa misma línea, después del tentativo de Repsol en 2014, Marruecos acaba de anunciar nuevas prospecciones frente a las Islas Canarias.
Marruecos acaba de anunciar nuevas prospecciones frente a las Islas Canarias. Ese anuncio se produjo justo después de que la empresa británica Europa Oil & Gas descubriese esta posibilidad de prospección.
Al parecer el yacimiento tendría un potencial para extraer unos 1.000 millones de barriles, que la compañía incluyó en su último informe de resultados presentado el pasado 13 de abril. Con los precios actuales, estaríamos hablando de un negocio de unos 100.000 millones de euros, lo que equivaldría a todo el PIB de Marruecos en 2020.
El l área de Inezgane, se encuentra en la cuenca de Agadir a unos 175 kilómetros al noreste de Canarias. Su proximidad a Lanzarote y Fuerteventura, concretamente en la costa de Tarfaya, supondría un análisis previo del grupo de trabajo sobre la delimitación de espacios marítimos, tal y como habían acordado apenas 10 días antes Mohamed VI y Pedro Sánchez.
Actualmente Europa O&G posee el 75% del permiso y es el operador de Inzegane, mientras que la Office National des Hydrocarbures et des Mines (ONHYM), es decir, el Estado marroquí, posee el 25% restante.
Además de los recursos, los migrantes.
Uno de los resultados del restablecimiento de relaciones plenas entre España y Marruecos, es la devolución a su país de los más de 20.000 inmigrantes marroquíes llegados a Canarias, según una información que publica el digital Ecsaharaui, próximo al Frente Polisario, que dice haber comprobado que se ha aumentado el número de vuelos que desde las islas trasladan al Sáhara Occidental a dichos inmigrantes.
El proceso de paz sigue por un largo camino.
Elena Rusca. Ginebra