Redes y juegos

Botines y botas de mujer: de la necesidad a la moda

Tiempo de lectura aprox: 3 minutos

Al igual que la indumentaria, el calzado surgió de la necesidad de proteger los pies de las circunstancias climáticas y las condiciones del suelo. Pero una vez resuelta esa necesidad,  la moda vino a proponer una infinidad de variables.

Tanto para hombres como para mujeres, los colores, las texturas, los géneros y los diversos modelos irrumpieron en el vestir diario de las personas, proponiendo desde la más fresca sandalia hasta el más abrigado y confortable de los botines y las botas. Como el resto de los calzados, éstos han evolucionado al ritmo de la humanidad. Los cambios sociales, la migración del campo a la ciudad, los tipos de empleo, los métodos de producción y los nuevos hábitos se vieron plasmados en su diseño.

La evolución a lo largo de la historia

Desde sus orígenes como elementos para proteger los pies, los botines de mujer han atravesado épocas revolucionarias que también se reflejaban en el calzado, hasta una actualidad donde brindan abrigo y confort, pero también identifican y destacan la personalidad y el estatus de quienes los usan.

Según los registros históricos, hombres y mujeres de las primeras civilizaciones de Mesopotamia y Egipto utilizaban este tipo de calzado e, incluso, comenzaban a decorar y ornamentar. Más tarde, cuando la mujer comenzó a quedarse en la casa, se transformaron en un elemento de uso casi exclusivamente masculino. Pero luego, los cambios provocados por los descubrimientos del siglo XIX en materia de tecnología repercutieron en la actitud de la mujer que se dispone a salir de la casa y a protagonizar ese nuevo escenario. Y el calzado acompañó ese despertar.

Los primeros botines y botas de mujer se diseñaron cerca de 1830, con la última etapa de la revolución industrial y de la mano de los avances tecnológicos de aquella época. Delicadas, de suela gruesa, con botones y lazos, notablemente diferentes del modelo icónico masculino, acompañaron a las mujeres de entonces en las actividades y eventos sociales de los que comenzaron a ser partícipes. La producción en serie de la segunda mitad del siglo XIX les permite a las clases sociales más bajas acceder a este tipo de calzado.

Mucho más tarde, en los años 60, las botas fueron el emblema de una década marcada por la juventud y la radicalidad en lo referido a la estética. Los lienzos, la seda y la tafeta, los géneros coloridos y alternativos compitieron y hasta reemplazaron al cuero como material de confección de este tipo de calzado. Aparecen las botas largas de mujer y las variables en la altura del taco y en los accesorios intervinieron el clásico modelo conocido hasta el momento.

Las tendencias y la injerencia de la moda

Cada época consignó y continúa consignando un estilo en el calzado. El paso del tiempo y el rol de la mujer en la vida social y económica modificaron la confección, los materiales y los diseños del calzado que ella utiliza. A diferencia de lo que ocurría en sus orígenes, actualmente las mujeres cuentan con una variedad mucho más amplia de botas en relación a las limitadas opciones masculinas y no faltan en ningún placard femenino.

De esta manera, el elemento rudimentario y necesario aparecido siglos atrás hoy se presenta como un objeto especialmente diseñado y deseado. Incluso, atravesado por las tendencias de la moda, muchas veces marca el estatus de quien lo viste.

Actualmente, el mercado de botines de mujer en Chile ofrece una gran variedad de modelos y precios, para todos los gustos y edades. Como ocurre con la indumentaria y los accesorios, las adolescentes cuentan con un abanico de posibilidades en materia de moda juvenil de botines de mujer.

Como en otros momentos de la historia, con frecuencia el calzado refleja la posición social y económica de una mujer. En función de su rol en la sociedad y de su poder adquisitivo, ésta puede optar por botas de una calidad superior y un precio abultado, así como por botas de mujer baratas. Es decir, en la actualidad el género femenino puede encontrar una infinidad de posibilidades en lo referente a botas de mujer en Chile.

¿Qué tener en cuenta a la hora de comprar botas o botines?

Con la aparición de las bajas temperaturas, llega el momento de comprar botas y/o botines para lucir en la nueva temporada. Al momento de adquirirlos se debe tener en cuenta el uso que se les va a dar y en función de ello el material, el largo de la caña y la altura del taco, entre otras particularidades.

Si bien año tras año la moda determina la oferta del mercado, también en materia de calzado, es importante no olvidarse de la funcionalidad y la comodidad. Dentro de ese inmenso universo de posibilidades, es fundamental elegir la bota o el botín que más se ajuste a la necesidad de la consumidora.

No es lo mismo elegir un calzado para ir caminando al trabajo todos los días donde se debe priorizar la comodidad, que para utilizarlo en salidas nocturnas u ocasiones especiales en las que se puede soportar un taco más alto y una horma menos confortable. Tampoco lo es uno que se usará para permanecer de pie muchas horas, al aire libre o en lugares climatizados.

En definitiva, sin perder de vista lo estético, lo moderno y lo distintivo, a la hora de comprar un calzado nuevo no es mala idea retrotraerse en el tiempo y contemplar su función original: proteger los pies.

Related Posts

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *