Réquiem por Don Osvaldo Cáceres G. (1926-2022). Un constructor del Chile del siglo XX
Tiempo de lectura aprox: 3 minutos, 8 segundos
Hace unos 14 años atrás cuando estaba al mando del Programa de Doctorado PROSPAL de la U. ARCIS, estando en Concepción dictando una conferencia sobre los procesos políticos de América Latina en la sede de la UARCIS de esa ciudad, al cierre de ella, se me acerco un señor, un adulto mayor, que me pregunto si era posible que una persona cómo él, se refería a su edad, sobre los setenta años, podría ingresar a estudiar el doctorado. Obviamente, para mí fue una muy grata sorpresa que una persona de su edad se interesará por estudiar los procesos sociales y políticos de América Latina. Se tratada de don Osvaldo Cáceres González, de profesión, arquitecto.
Rápidamente me puso al tanto de quien era y cuáles eran sus certificaciones académicas y profesionales para ingresar al programa. Las tenían toda y de sobra. Me contó que por las circunstancias de la historia reciente (1973-2008) no había podido obtener su doctorado. Luego de escucharlo, lo invite a una entrevista formal, en la ciudad de Temuco, dónde funcionaba un sección del PROSPAL, en el Centro de Mujeres de Temuco, que dirigía Fresia Cea, feminista y luchadora social por los derechos humanos. Don Osvaldo se integraría a la segunda promoción de Prospal-Temuco.
El espacio temuquense se había convertido en un lugar de encuentro intergeneracional, paritario, abierto, plural, intercultural y con plena diversidad. Todas, todos y todes tenían cabida. Los hombres y las mujeres de ayer, del Chile popular, como Fresia Cea y Don Osvaldo, entre otros; los del Chile dictatorial; los del Chile de la democracia protegida y algunos y algunas que nos anunciaban el Chile de hoy. Durante aproximadamente 7 años la casa de Francia con Inglaterra, donde se localizaba el CMT fue un espacio en donde las experiencias de esos tres Chiles se encontraron, debatieron, se reconocieron, se comprendieron y, tal vez, forjaron y soñaron el Chile de hoy. A ese grupo humano se integró Don Osvaldo Cáceres, con toda su historia y cargando un saber único, el cual puso disposición de todes. Fue un aporte. Donde todos aprendimos.
Don Osvaldo se integró al programa activamente y durante tres años (2008-2010) estuvo viajando, desde los Ángeles a Temuco, para asistir a las clases que se impartían tanto los días viernes y sábado, era uno de los primeros en llegar. Se caracterizaba por ser muy puntual y un excelente lector, participativo y atento. Gran conocedor de la historia de Chile y de América. Sus intervenciones en las clases eran lecciones en todas las dimensiones posibles. Su desempeño académico e intelectual fue de los mejores.
En el año 2011 entregó su Tesis doctoral que verso sobre el desarrollo urbano de las ciudades de Chile en una perspectiva histórica, arquitectónica y política. La comisión que lo examino, a sus 84 años de edad, estuvo integrada por otros dos grandes arquitectos nacionales, ambos compañeros de ruta en la larga trayectoria profesional y política de Don Osvaldo Cáceres, Miguel Lawner y Alfredo Rodríguez. Fue un examen de grado a la cual asistieron muchos de sus compañeros como también docentes del PROSPAL.
No voy a reseñar aquí la tremenda trayectoria profesional y artística de Don Osvaldo, tan solo quiero recordar su paso por el programa de Doctorado PROSPAL, pues, los acontecimientos de septiembre de 1973 y los 17 años de dictadura como la instalación de la lógica del capitalismo académico neoliberal en las universidades nacionales lo habían privado de la posibilidad de obtener su doctorado en las materias que al él le interesaban y motivaban: la historia arquitectónica y urbana de Chile.
El PROSPAL desde su fundación fue pensado a contracorriente de las tendencias que todos los programas de posgrado habían asumido en las universidades chilenas influenciadas por los Acuerdos de Bolonia, eran y son programas gestados desde el pensar gerencial académico neoliberal. En ninguno de ellos la sapiensa de un humanista como Don Osvaldo Cáceres habría tenido un cupo. Pero si lo tuvo en el PROSPAL.
El Dr. Cáceres González, fue uno de los primeros doctores del Prospal-Temuco, el mayor de todos, pero no el único adulto mayor, con anterioridad a él, habían recibido su doctorado, la profesora Matilde López, el economista y experto en temas de energía Sergio Mancilla, el profesor de historia, Carlos Sandoval y el investigador y docente en comunicación Alonso Azócar. Todxs, destacados académicos en sus ámbitos profesionales pero que ningún programa doctoral los admitía, pues, estaban fuera de todos los rangos etarios considerados aptos para estudiar un doctorado. La discriminación y la exclusión por edad es uno de los mecanismos preferidos y activos de la gestión académica neoliberal actual. Pero, el PROSPAL, no discriminaba ni excluía, por eso, nos orgullecemos hasta el día de hoy de haber tenido entre sus estudiantes y doctores a uno de los constructores del Chile del siglo XX, Don Osvaldo Cáceres González (1926-2022)
A todxs los que quieran conocer su trayectoria pueden consultar: https://www.yumpu.com/es/document/read/62417913/retrospectiva-osvaldo-caceres-arquitecto-investigador-creador
Vaya esta pequeña semblanza de su paso por el PROSPAL… a través de este medio quiero entregar mis más sentidas condolencias a su familia, en especial a Gonzalo Cáceres, uno de sus hijos y destacado historiador, como a todxs los que supieron reconocer a este hombre como uno de los tantos constructores del Chile en el siglo XX.
Por Juan Carlos Gómez Leyton
San Joaquín, febrero de 2022
JCGL/jcgl