Columnistas Poder y Política

No señor Piñera, el deber de las Fuerzas Armadas es resguardar la soberanía, no andar matando mapuches

Tiempo de lectura aprox: 3 minutos, 28 segundos

A raíz del asesinato del joven mapuche Yordan Llempi por parte de un infante de marina, el presidente Piñera ha declarado que las Fuerzas Armadas cumplen con su deber. No señor Piñera, el deber de las Fuerzas Armadas en cualquier país serio, es resguardar la soberanía ante posibles ataques desde el exterior, en defensa de los nacionales y del territorio, en ningún caso dedicarse a reprimir y menos asesinar a personas de su propio país.

Las Fuerzas Armadas deben tener el derecho a no obedecer órdenes de un desquiciado, paranoico y enajenado mental que le ha declarado la guerra no sólo al pueblo mapuche, sino a todo el  pueblo de Chile:

“Vamos a combatir a los terroristas, que son un enemigo formidable, implacable, cruel, despiadado y que hoy día está actuando en forma organizada, con apoyo externo, con armamento de guerra”. (Palabras del   Presidente Sebastián Piñera pronunciadas el día 24 de junio de 2018 en el  Palacio de La Moneda), refiriéndose a la violencia en la Araucanía.

“Estamos en guerra contra un enemigo poderoso e implacable que no respeta a nada ni a nadie y que está dispuesto a usar la violencia sin ningún límite”. (Palabras del ‘Presidente’, entre comillas, pues no está ejerciendo el mando, Sebastián Piñera pronunciadas el 20 de octubre de 2019 en la Guarnición de Santiago).




En esta ocasión, sin embargo, el jefe de la Defensa Nacional a cargo del Estado de excepción, general Javier Iturriaga, le replicó que “la verdad, es que yo no estoy en guerra con nadie”. ¿Hasta cuándo hace el ridículo el señor Piñera? De seguro su paranoia no le permite darse cuenta.

Pero su esquizofrenia quedó plasmada unos días antes, al declarar que Chile era la excepción en América Latina, un verdadero “oasis”. Es decir, de un oasis democrático a un país en guerra en apenas una semana. Lo que pasa es que su soberbia y megalomanía, le impidieron ver que ese “oasis” contenía sólo agua en descomposición desde hacía ya 30 años.

Pero junto con declararnos la guerra y, con el objeto de tener una excusa para ordenar una feroz represión, se da el lujo, cual aprendiz de Nerón, de aprobar la quema de varias estaciones del Metro, especialmente las que cubren el servicio de los barrios más populares de Santiago:

“El 18 de octubre cuando supimos que iban a atacar las estaciones del Metro, 136 estaciones, hablamos con el general Rozas. Decíamos que se requieren mínimo 10 carabineros para proteger una estación de Metro, por 136 estaciones, 1360 carabineros. No teníamos esos carabineros”. (Palabras del presidente Piñera el 12 de marzo de 2020 en  el noticiario de Megavisión).

Pregunta obligada: ¿si la Región Metropolitana cuenta con una dotación de 14.240 carabineros, dónde estaban los otros 12.880 carabineros?, ¿en qué tareas se encontraban ocupados?

Para que no sospecháramos que el Presidente de la República había autorizado tamaña destrucción (cuya reparación que llevó más de una año le costó al pueblo de Chile, nada menos que 235 millones de dólares), se fue a celebrar el cumpleaños de su querido nieto en una concurrida pizzería del barrio alto de la capital.

El día 14 de febrero de 1929, en la ciudad de Chicago, Estados Unidos, se produjo una de las matanzas más grandes de la historia: la llamada matanza del día de San Valentín. La hipótesis más cercana a la verdad sobre el ejecutor intelectual de esos asesinatos, llevaba a la persona de Al Capone. Sin embargo, justo en el momento de la matanza, el conocido gánster ofrecía una  gran recepción en su residencia;  entre los invitados, se contaban el alcalde de la ciudad de Chicago, el jefe de la policía y otras personalidades de la sociedad y de la política. Al Capone nunca fue siquiera inculpado y a la postre, fue condenado por evasión  de impuestos, por los que pasó  7 años en la cárcel.

 

El papel de las Fuerzas Armadas.

 

El militar de mayor rango de los Estados Unidos, el general Mark Milley, que es el jefe del Estado Mayor Conjunto, ha tomado la insólita decisión de pedir perdón públicamente por haber acompañado vestido de uniforme de combate al presidente, Donald Trump, a pasear por la plaza de enfrente de la Casa Blanca después de que ésta fuera desalojada por la fuerza por los antidisturbios hace dos lunes.

«No debería haber estado allí», dijo el general Milley, del Cuerpo de Infantería, en un discurso grabado en vídeo para la ceremonia de graduación de la Universidad Nacional de Defensa. «Al estar allí di la impresión de que las Fuerzas Armadas están involucradas en política nacional, y no es el caso», añadió el general. (ABC Internacional, 12/6/2020).

«Como comandante en jefe quiero, en primer lugar, reconocer y felicitar la reacción demostrada por la patrulla de infantes de Marina. En segundo lugar manifestar el orgullo de constatar el compromiso, profesionalismo y sentido de cumplimiento del deber del personal de la Armada, de acuerdo a las atribuciones y deberes asignados en este estado de excepción constitucional de emergencia decretado por el Gobierno». (Comandante en jefe de la Armada, Juan de la Maza en declaraciones a El Mercurio, reproducidas por El Ciudadano 7/11/2021).

Es decir, el militar de mayor rango de Estados Unidos pide perdón por un error cometido vestido de uniforme de combate acompañando al presidente Trump en una de sus acostumbradas actuaciones desquiciadas. En contraste, el comandante en jefe de la Armada de Chile, felicita “la reacción de la patrulla de infantes de marina” la cual,  tuvo como resultado nada menos  que el asesinato de  un joven mapuche y, no contento con ello, manifiesta su orgullo de tan extraordinaria hazaña. ¡Qué tal!

“Esta mañana hablé con el presidente del Estado Mayor Conjunto, Mark Milley, para analizar las precauciones disponibles para evitar que un presidente inestable inicie hostilidades militares o acceda a los códigos de lanzamiento y ordene un ataque nuclear. La situación de este presidente desquiciado no podría ser más peligrosa y debemos hacer todo lo posible para proteger al pueblo estadounidense de su asalto desequilibrado a nuestro país y nuestra democracia”. (Comunicado de la líder de los demócratas y jefa de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, Nancy Pilosi, 9/1/2021)

 

Hugo Murialdo



Periodista, magíster en Ciencias de la Comunicación y magíster en Filosofía Política.

Related Posts

  1. Toda vez que se habló de «revisar el estado mental» de Piñera , no hubo apoyo…tal vez para no manchar la «gran democracia» de la república?

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *