El drama de más de 200 bolivianos bloqueados por el Covid-19 en Huara
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Desde hace una semana se encuentran bloqueados, en cuarentena, más de 200 bolivianos parados en la frontera entre Chile y Bolivia sin posibilidad de regresar a su país, sin ayuda del país en lo cual se encuentran, en condiciones precarias, sin comida, con el invierno que gentilmente se acerca.
Las declaraciones de las autoridades que estuvieron en la frontera Pisiga y noticias que circulaban por los medios de comunicación nacionales dejaron desolados a los bolivianos bloqueados en la frontera.
El ministro de Defensa, Fernando López, no solo no venía por su repatriación, venía para asegurarse que las fronteras estuvieran bien cerradas. También la Canciller, Karen Longaric, en uno de sus últimos Twitter dijo que no traerán ayuda humanitaria y hasta el momento no han recibido nada de parte de las autoridades nacionales.
“Estamos a una semana durmiendo en la intemperie, mal dormidos, pasando frío y sin salir del campamento, en cuarentena. Si no fuera por la colaboración de la alcaldía de esta región de Huara, de los hermanos chilenos, de los residentes bolivianos en Chile que han estado solidarizándose con carpas, con frazadas y con comida estaríamos aún peor, pero no sabemos hasta cuándo será esta ayuda. En ese sentido, pedimos e imploramos a las autoridades bolivianas, así también a nuestros mismos hermanos y hermanas bolivianas que nos permitan retornar a nuestro país. Nos comprometemos a cumplir con todos los protocolos y normas sanitarias de la Organización Mundial de la Salud en relación al coronavirus, así también la cuarentena que dispuso el gobierno interino de Jeanine Áñez”.
Más de 200 personas, niños y mujeres, embarazadas también, se encuentran actualmente en la región de Huara, bloqueados.
“Nos encontramos en la frontera en la región de Huara, a dos horas del territorio boliviano”, nos cuenta Mónica Quijua, que se encuentra en la región. “Hemos recibido noticias de parte del ministerio de Relaciones Exteriores y Defensa que el día sábado nos van a llevar a suelo boliviano e instalar en un campamento, transitorio, en la espera de ponernos en un campamento más estable. Tenemos todavía un poco de preocupación y queremos que la comunidad y las organizaciones de derechos humanos se queden vigilantes de nuestra situación a pesar que entraremos en suelo boliviano. No queremos alojamiento de lujo pero sí, lo básico, que no nos falte agua, duchas, porque aquí donde estamos alojando no tenemos ducha y nos vamos a lavar cuando podemos, pagando. Queremos solamente que haya condiciones básicas, también para cuidarnos de la mejor forma contra el coronavirus, para pasar de la mejor forma nuestra cuarentena”.
“Las autoridades nos dijeron que nos van a pasar frazadas, pero no aludieron al tema del agua. El día que la canciller anunció nuestra repatriación, estábamos súper felices, y luego, la misma canciller suspende nuestra repatriación”, sigue contando Monica Quijua. “Nos hemos sentidos burlados, discriminados, vulnerados en nuestros derechos. En tema de salud y alimentación, de parte de la autoridad chilena de la región de Huara, hemos recibido a una doctora que vino en tres ocasiones a vernos, haciendo controles sobre todo a las mujeres embarazadas y a los niños. Ella dijo que a pesar de todo estábamos bien. En relación a la alimentación la región de Huara y los habitantes de la región hemos logrados palear un poco nuestra alimentación. Igual eso no alcanza para todos. El gobierno de Bolivia, al contrario, hasta el momento no hizo nada”.
“Estamos preocupados porque en esta región ya se está acercando el invierno, el frío, y tememos que esto pueda empeorar nuestras condiciones de salud y que seamos más proclive a enfermarnos”, alerta Monica. “Las autoridades chilenas se relacionaron con las autoridades bolivianas para ayudarnos, llevarnos hasta las fronteras con buses. Lamentablemente no podemos decir lo mismo de las autoridades bolivianas: al mismo tiempo que la Cancillería y el ministerio de Defensa están anunciando que están preparando todo para nuestra llegada, están difundiendo versiones contradictorias en el tema de nuestro cuidado. En el comunicado de relaciones exteriores dicen que ellos hicieron lo necesario, aunque eso es falso, ellos nunca intervinieron, ni en tema de salud, ni alimentación o traslado. Hay muchas cosas precarias que estamos viviendo”.
Por Elena Rusca