Diputados y constituyentes: una contradicción desde el origen
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¿Es el funcionamiento de la Convención Constituyente una actividad intrínsecamente político partidista? ¿Puede asimilarse el rol del constituyente a los roles de un diputado o de un senador?
Estas preguntas son relevantes pues la actual constitución que impera en el país prohíbe a las organizaciones sindicales participar en actividades “político partidistas” y, además, los dirigentes gremiales y vecinales no pueden ser candidatos a diputados ni a senadores. Si se asume que los requisitos para ser candidato a miembro de la constituyente son los mismos que hoy en día imperan para las elecciones parlamentarias, entonces los líderes vecinales y gremiales quedarían olímpicamente fuera de esta nueva e importante institucionalidad nacional.
Si se asume, por el contrario, que diputados y senadores, expresamente mencionados en la constitución, son una cosa, y los constituyentes – que no aparecen en la constitución- son una cosa distinta, entonces los líderes gremiales y vecinales podrían participar sin problema como candidatos en la elección de miembros de la constituyente. La función de los diputados y senadores es legislar y controlar al ejecutivo. Esa es la función que les asigna el Estado y para ello es que son elegidos. La función de los constituyentes es redactar una nueva constitución. Son dos cosas distintas.
Estas son cuestiones que puede que no estén actualmente a la orden del día, pues tiene que ganar primero la opción Si, en el referéndum que se realizará en abril, para pasar solo a partir de ese momento al proceso electoral propiamente tal. Pero tarde o temprano – y siempre en el primer semestre del presente año – la nominación de candidatos se pondrá a la orden del día. Y discutir sobre ese tema es, en el fondo, discutir sobre los grados posibles de participación y de representación que deben tener los organismos sociales de base y sus correspondientes líderes o dirigentes, sean o no militantes de algún algún partido político, como para jugar el rol de protagonistas de primera línea en el proceso constituyente. Este tema tiene que ver también con la posibilidad y la forma en que pueden participar los independientes en la jornada electoral constituyentista, tema que ya está desde un principio en la discusión sobre este inédito proceso de generación de una nueva constitución democrática y participativa.
La derecha es seguro que se jugará porque el voto no sea obligatorio, y porque la participación como candidato sea tan restringida como lo es hoy en día en las elecciones parlamentarias. Pero en cada uno de estos detalles se juega la suerte del proceso. No hay que olvidar que el diablo opera y se manifiesta a través de los detalles.
Por Sergio Arancibia